PPL lleva desaparecido 10 días en la Penitenciaría
La madre de Érick Cerezo, un PPL que cumplía condena desde 2017 por robo, no sabe nada de su hijo desde el día del motín en la Penitenciaría.
Según la mujer, el interno le habría llamado a su celular para contarle que acababan de lanzar una bomba cerca de su celda y que había sido herido.
Al otro día habría recibido otra llamada desde el interior del centro carcelario, era su hijo diciéndole con voz débil que le dolía mucho el cuerpo debido a que una esquirla de una bomba que le había herido en el abdomen.
Estas llamadas alteraron los días en la casa de Érick, desde donde intentaban a través de su abogada obtener más información de lo que estaba sucediendo al interior de la Penitenciaria.
Según los familiares del interno, su abogada habría logrado que el joven salga escoltado por guías con destino al hospital del Guasmo Sur, en donde sus padres pudieron hablar con él, para luego ser trasladado nuevamente a la prisión, su madre dice que esa fue la última vez que supo de Érick.
Al día siguiente tras el motín, las autoridades confirmaron la muerte de 68 presos, y publicaron de la lista de heridos y fallecidos.
En esa lista, el nombre de Érick no apareció, por lo que desde entonces los familiares del joven han estado recorriendo la cárcel y Medicina Legal para obtener alguna información.
Ellos han entregado fotos de Érick a policías y guías penitenciarios para que los ayudaran a encontrarlo dentro de las celdas. Estos últimos le aseguraban que estaba vivo en el pabellón 8, pero no han podido confirmar nada.
En la morgue también dejaron las características físicas de su hijo, en este lugar un perito le indicó que no tenían un cuerpo con esa descripción.
No fue hasta el martes 16 de noviembre que tuvo una respuesta, su hijo estaba en condición de desaparecido.
El Comité para la Defensa de los Derechos Humanos de Guayaquil también está al tanto de este caso. Este organismo ha seguido de cerca las masacres que se han perpetrado en las cárceles de Guayaquil.
