El emprendedor busca rescatar la tradición de la identidad manabita a través de este producto, que oferta en varias ciudades del país.

El Ministerio de Agricultura estudia lanzamiento de un programa de mejoras competitivas para el sector. Exportaciones de los últimos cinco años se redujeron por baja productividad del campo.

En el noroccidente de la provincia serrana opera una asociación de productores que entrega el fruto de su trabajo a empresas como la firma Café Minerva.

Las tiendas tienen diversos valores para esta planta. Los 100 gramos pueden variar de $ 12 a $ 45, que depende de la calidad y presentación. El mayor gancho son los espacios de degustación.

Anecafé estima que las ventas externas del producto llegarán a los 60.000 sacos de 60 kilos. El MAG indica que el país tiene 86.741 hectáreas de café, entre las variedades Arábigo y Robusta.

La baja productividad de las fincas incide en que el sector envíe menos grano al exterior. El MAG emprende un plan para mejorar la situación.

La vida útil de las nuevas plantaciones puede llegar a los 40 años con un buen cuidado por parte de los productores. Más de 9.000 familias están inmersas en la nueva era de este producto que en Manabí es parte de la vida cotidiana de los agricultores, especialmente del suroeste de la provincia. Ahora no solo venden café en grano sino que también han incursionado en los valores agregados. Ya exportan a Europa y están en comercios del país.