Cuatro exempleados de la empresa de seguridad Blackwater fueron declarados culpables este miércoles por su responsabilidad en la muerte en un tiroteo de 14 iraquíes en Bagdad en 2007, que dejó otros 16 heridos. Un jurado de Washington declaró a Nicholas Slatten culpable de homicidio en primer grado, mientras que Paul Slough, Evan Liberty y Dustin Heard fueron culpados de homicidio voluntario.