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Entrevista / franz del castillo/ pintor y caricaturista

Franz del Castillo se convirtió en el caricaturista más rápido de Ecuador

Franz del Castillo se convirtió en el caricaturista más rápido de Ecuador
10 de agosto de 2014 - 00:00 - Redacción Regional Centro

El ibarreño Franz del Castillo se considera un pintor y caricaturista con proyección internacional.

Con el proyecto cultural Fandango, del Castillo se dio a conocer dentro y fuera de Ecuador, a través de 25 óleos y acrílicos de gran formato que recrean las fiestas y el diario vivir de 17 etnias indígenas de la Sierra.

Esa propuesta le servirá, además, para recorrer otros escenarios de exposición en Estados Unidos, Colombia, España, Cuba y Emiratos Árabes Unidos (Dubái).

También se ha propuesto ganar un récord Guinness como el caricaturista más rápido, pues traza un dibujo en menos de un minuto. A sus 24 años se ha convertido en un referente juvenil de perseverancia.

¿Cómo se volvió un virtuoso del lápiz y pincel?

La habilidad plástica es una herencia de familia por parte de mi madre. Con el tiempo aprendí a tecnificar esa vocación en las aulas y en la cotidianidad.

¿A qué edad descubrió esa habilidad?

Mi padre tenía la mala costumbre de anotar los números telefónicos en las paredes con la punta de una llave, y yo hice lo mismo a los 4 años, pero con dibujos. La sensación fue muy agradable. Mi primer dibujo fue una iglesia.

¿Cuál fue la paradoja entre el dibujo y la escuela?

A los 6 años, para ingresar a la escuela, me negaron la matrícula porque decían que yo no podía dibujar. Fue un error porque me obligaron a coger el lápiz con la mano derecha y yo soy zurdo.

¿Se planteó perfeccionar esa habilidad?

Así es. Decidí ingresar al Instituto Superior de Artes Plásticas Daniel Reyes, de San Antonio de Ibarra. Sin bien esto me ayudó, también opté por el autoaprendizaje. Incluso ahora acabo una licenciatura en Diseño Publicitario en la Universidad Técnica del Norte (UTN), en Imbabura.  

¿En qué momento despertó el caricaturista?

Hice caricaturas desde la escuela. Dibujaba a los compañeros y profesores. No me importaban las burlas y las risas que mi pasión causaba. No me reprimía. De hecho, en sexto curso un dibujo me abrió las puertas de un periódico nacional en Quito en 2008.

¿Este hecho le abrió las puertas de la televisión también?

Primero fue una televisora del norte, cuyos ejecutivos quedaron admirados por la rapidez con la que hacía una caricatura, en menos de un minuto. Así entré a las cámaras para graficar la noticia más importante de la semana. Luego pasé a un canal nacional.

¿Quería más, verdad?

Definitivamente sí. Me propuse entregar una caricatura a los famosos que llegaban al Ecuador con el apoyo de un espacio televisivo de gran acogida en el país. Dibujé a Marilyn Manson, Ozzy Osbourne, Evo Morales, Hugo Chávez, Rafael Correa, Calle 13, La Oreja de Van Gogh, Juan Gabriel, La Ley, Paco de Lucía, Juanes, y otros.

¿Cómo ayudó eso a su proyección de artista universal?

La proyección fue virtual a través de las redes sociales y periódicos digitales del mundo. Mis dibujos pudieron verse en diarios de Rusia, Bolivia y México. Mi nombre empezó a sonar. Entonces decidí formar mi propia empresa.

¿Era ya el momento de buscar el récord Guinness?

Lo es. Busqué 4 nominaciones al récord Guinness: 1.000 caricaturas durante un día, dibujar una caricatura en la cima del volcán Cotopaxi, la caricatura más grande de Ecuador (terreno de 3 ha) y hacer la caricatura más veloz (7 segundos)

¿Tiene rivales?

En realidad son categorías que se van a imponer en este año. Soy el único. De hecho para algunas personas ya soy el ganador.

¿Qué opina su familia, le apoyó siempre?

Siempre hubo discrepancias, especialmente de mi padre. Cuestionaba mi vocación diciéndome que los pintores se mueren de hambre. Me exigía un título profesional.

¿Qué hizo entonces sin el apoyo decisivo de su progenitor?

Perseverar y empezar diversos proyectos y exposiciones con presupuestos mínimos. El desaliento llegaba de todos lados, los profesores me decían que el caricaturista termina dibujando para comer en un parque.

¿Es así?

Claro que no. La perseverancia y el emprendimiento hacen la diferencia. Ahora tengo un segmento llamado caricaturizando en TV, un segmento visto por miles de personas en el mundo. 

¿Qué otras metas se ha propuesto?

Las más grande e importante es trascender en el tiempo y en el espacio. Hago lo que me gusta y busco que mi obra sea un referente de Ecuador, pues llevo a mi patria en el corazón.
Con su talento difunde la alegría, el optimismo y la consecución de retos. Es un referente a sus 24 años.

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