Actores de la actividad pesquera, tanto extractiva, de procesamiento y comercialización, así como funcionarios de instituciones que están vinculadas a la tarea pesquera, participan desde ayer en el taller ‘Pesca ilegal no declarada y no reglamentada’.

La conferencia se fundamenta en dar a conocer la importancia de desalentar la pesca ilegal no declarada, no reglamentada. “Este es un mal que azota a nivel mundial y por eso los países nos hemos comprometido a erradicar esta práctica nociva para los recursos ictiológicos en el mundo”, destacó Pilar Proaño, viceministra de Acuacultura y Pesca.

El taller es organizado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), a través del Viceministerio de Acuacultura y Pesca, en coordinación con la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).

La viceministra resaltó que  este taller se hace con Estados Unidos porque ese país sacó dos leyes que serán aplicadas en 2018. Una es el reglamento a la ley de mamíferos marinos y la otra es la ley contra la pesca ilegal, en la cual tienen procedimientos y regulaciones.

En estos dos días del evento se revisará la nueva visión que dicho país tiene para desalentar esta práctica nociva, “que permita abrir el panorama a todos y poder sostenernos y sustentarnos de mejor manera, para juntos caminar en este desaliento de esta práctica de pesca ilegal”.

Pablo Guerrero, director de pesquería de la WWF Ecuador y Latinoamérica, expresó que la temática de pesca ilegal es muy actual; se trata de un delito ambiental que requiere decisión política y una acción coordinada de todos para poderla combatir.  

En la jornada también expuso Oswaldo Rosero, especialista en control y vigilancia marítima, que trató sobre el panorama general citando cifras.

El impacto de la pesca ilegal en el mundo está calculado entre $ 10 millones y $ 23,5 billones y representa el 20% del mercado mundial, es decir, la pesca ilegal es un problema. (I)