Túnez.- El diputado Mohamed Brahmi, dirigente del partido de izquierda Movimiento Popular, fue asesinado ayer a balazos frente a su domicilio cerca de Túnez, confirmó el Ministerio del Interior tunecino.

El asesinato de Brahmi, el segundo de un dirigente opositor este año, provocó manifestaciones en Sidi Buzid, ciudad natal de Brahmi, y en la vecina Benzel Buzaiene, donde miles de manifestantes quemaron la sede del partido islamita Ennahda en el poder.

La familia de Mohamed Brahmi acusó directamente a Ennahda del asesinato en una declaración a la AFP. “Acuso a Ennahda. Ellos lo mataron”, dijo llorando Chhiba Brahmi, hermana de la víctima, en el domicilio natal de Brahmi, en las afueras de Sidi Buzid. “Nuestra familia tenía el sentimiento de que Mohamed iba a correr la misma suerte que Chokri Belaid”, agregó, recordando el asesinato del opositor antiislamita asesinado el 6 de febrero pasado.

En la avenida Habib Burguiba, en el centro de la capital tunecina, se concentraron centenas de manifestantes que gritaban “Ghannuchi asesino”, en referencia al jefe del partido Ennahda. “Túnez libre, fuera los Hermanos”, gritaban los manifestantes aludiendo al vínculo de Ennahda con el movimiento de los Hermanos Musulmanes de Egipto.

Fuentes políticas informaron que  el dirigente recibió once balazos frente a su vivienda, situada en un barrio de Túnez, que se encuentra en la provincia de Ariana. El testimonio de su hija afirma que dos hombres le dispararon desde una motocicleta en el momento en que Brahmi descendía de su automóvil.

“Alá Akbar (Dios es grande), Mohamed Brahmi murió, acribillaron su cuerpo con balas delante de su esposa y de sus hijos”, declaró, llorando a la radio, Mohsen Nabti, miembro la dirección del Movimiento Popular.

“Hoy, en el día  que Túnez celebra a la República, asesinaron a sangre fría a un militante de la democracia”, declaró el abogado Mabruk Korchid. Ayer se conmemoró el 56º aniversario de la proclamación de la República en Túnez.

El principal partido gubernamental tunecino, el islamita Ennahda, condenó el suceso y lo calificó de “crimen atroz y cobarde”.

En un comunicado firmado por el líder del movimiento, Rachid Ganuchi, la agrupación aseguró que el crimen “es un nuevo intento de golpear la seguridad del país y empujarlo a la violencia”.

En la nota, el movimiento subrayó que la muerte de Brahmi coincide con un momento en el que la situación política  experimenta  un avance con la elección de los órganos para las reformas políticas y la preparación del borrador de la Constitución.

El partido, además de instar a las fuerzas de seguridad y a la justicia a que actúen con celeridad, llamó a los tunecinos a la contención y a mantener la unidad nacional.

El presidente francés, François Hollande, condenó “firmemente” el asesinato de Brahmi en un comunicado difundido por el Elíseo, en el  que pide que se “esclarezca rápidamente el asesinato”.

Brahmi, de 58 años, fundador del Movimiento Popular, un partido nacionalista de izquierda, había sido elegido diputado en Sidi Buzid, cuna de la revolución que derrocó al presidente Ben Alí en el año 2011.

Brahmi, conocido por sus críticas contra los islamitas en el poder, había renunciado el 7 de julio pasado al puesto de secretario general de su partido considerando que había sido infiltrado por los islamitas.