La Policía desarticuló una banda en la que uno de sus integrantes operaba desde la cárcel de Ibarra.

Las autoridades detuvieron a 16 personas en el marco del operativo “Impacto 458”, además se allanaron 18 inmuebles en Quito y la cárcel de Ibarra.

El coronel Byron Ramos, jefe de Antinarcóticos del Distrito Metropolitano de Quito, señaló que investigaron durante tres meses y que entre los detenidos hay un colombiano y un venezolano. De los 16 capturados, cinco tienen antecedentes por tráfico ilícito de estupefacientes, robo y homicidio.

En la cárcel de Ibarra se realizó un operativo de control, ya que las investigaciones previas determinaron que el ecuatoriano  Segundo Víctor A., que se encontraba ya en prisión, manejaba la organización delictiva de microtráfico desde la cárcel.

Este sujeto, que tiene antecedentes (3 por tenencia de droga y uno por tráfico ilícito)  daba órdenes para que el resto de la banda entregara  las sustancias en diferentes lugares de la capital.

Entre las evidencias se encontraron 16 teléfonos,  $ 1.747, 3 balanzas, 11 recibos de envíos al exterior, una motocicleta y un vehículo 4x4. Según el coronel Ramos, la marihuana cripy llegaba desde Colombia y se distribuía  en la ciudad.

Indicó que tienen nuevos indicios de la organización en el vecino país y que realizan labores de inteligencia con la Policía colombiana. En este operativo incautaron 37.501 gramos de marihuana.

Operaban en ocho de los nueve distritos de Quito (Calderón, Eugenio Espejo, Manuela Sáenz, Eloy Alfaro, Tumbaco, Los Chillos, La Delicia y Quitumbe).

Al momento se abrieron tres investigaciones previas para identificar a los grandes proveedores de esta sustancia química. Además, el mayor Juan Carlos Avilés, jefe de operaciones, indicó que se encontraron 7,6 gramos de ácidos que presumiblemente serían dietilamida de ácido lisérgico (LSD), una droga que se usa en lengua, ojos y otros órganos.

Ramos precisó que el costo de la marihuana cripy oscila en el mercado entre $ 700 y $ 800 el kilo. (I)