Lorena (nombre protegido) veía televisión con su esposo y dos hijos cuando por la ventana de su casa lanzaron tres bombas molotov (elaboradas con botellas y químicos). Parte de la sala y del portal se incendiaron y habitantes del sector ayudaron a apagar las llamas.

El hecho ocurrió el lunes, a las 23:00, en el sector Nueva Prosperina, en el noroeste de Guayaquil.

La víctima denunció el ataque y señaló como responsables a sus vecinos. La mujer comentó que los agresores, supuestamente, se dedican al microtráfico de drogas y a otros delitos.

“Una vez les cayó la Policía y desde ahí nos dicen que fuimos los sapos. Ahí empezaron los problemas y amenazas”.

Lorena teme por su vida y la de sus hijos, aún menores de edad. “La semana pasada uno de ellos le faltó el respeto a mi hermana, la insultó, y yo fui con el palo de escoba y le pegué en la espalda. Me dijo que se metería a mi casa para matarme”. (I)