El juez de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha, Marcos Rodríguez, ordenó ayer la prisión preventiva del excomandante general de Policía, Fausto T., quien fue vinculado junto a una mujer en el caso de una organización delictiva conformada al interior de la institución policial que cobraba a uniformados por otorgarles pases a ciudades elegidas.

Durante la audiencia de vinculación, efectuada sin la presencia del general en servicio pasivo. El fiscal de Pichincha, Wilson Toainga, presentó como elementos de convicción las versiones del personal de la Policía que se habría favorecido con los pases irregulares. Por esta razón el juez dictó la prisión preventiva en contra del excomandante y medidas sustitutivas a Teresa B.  

Alrededor de las 13:00, Fausto T. llegó a las instalaciones de la Corte Provincial, ubicadas en el norte de Quito, y se entregó voluntariamente. Posteriormente, fue trasladado al hospital de la Policía para practicarle una evaluación médica.

Investigación de pases

La Fiscalía estableció la existencia de un grupo de gendarmes que tramitaba los pases, para lo cual reclutaban a los policías que pagaban entre $ 800 y $ 1.500 para ser trasladados a las ciudades que elegían.

La investigación se inició en julio del año pasado, luego de que el ministro del Interior, José Serrano, denunció que existía esta red de corrupción, lo cual motivó la renuncia de Fausto T., quien se desempeñaba como comandante general.

Esto permitió a la Fiscalía iniciar la indagación previa que desembocó en una audiencia efectuada el 30 de diciembre de 2015, en la que fueron sindicados 20 policías en servicio activo que integraron la organización, a 17 de quienes les dictaron prisión preventiva.

Toainga indicó que el excomandante firmaba los pases que se elaboraban de forma antitécnica. Además de que disponía a sus edecanes y ayudantes a realizar los trámites que se ordenaban a través de telegramas.

Una vez confirmados los traslados, el dinero era depositado en cuentas bancarias que indicaban los miembros de la organización, después uno de los policías sindicados entregaba el  50% al excomandante y el resto era repartido entre ellos, lo que, incluso, se hacía en el subsuelo de una villa de propiedad del alto oficial. La Fiscalía estima que la red habría tramitado de esta manera por lo menos 800 pases.

En la misma audiencia, el fiscal Provincial sindicó a Teresa B., madre del teniente Alexis C., quien sería uno de los principales cabecillas, ya que aparece una casa a su nombre valorada en $ 70.000 y un automóvil marca Kia nuevo que habría cancelado en 2 pagos.

Defensa de sindicados

Ricardo Vaca, abogado defensor de Fausto T., dijo que la Fiscalía basó su teoría en rumores y no hay pruebas reales ni elementos de peso  para vincular a su cliente.
Carlos Cuchala, representante jurídico de Teresa B., aseguró que el automotor fue adquirido con anterioridad a los hechos y la propiedad pertenece a su hijo.

La denuncia formal del Ministerio del Interior ante la Fiscalía se presentó el 20 de julio de 2015, luego de efectuadas las investigaciones internas en la Policía para verificar la existencia de actos de corrupción en la institución, inherente a la expedición de cientos de pases en beneficio de varios uniformados.

La indagación interna evidenció  los hechos irregulares en la entidad que se desenvolvieron a través de una organización, conformada por miembros de la misma institución, cuyo propósito era negociar pases con una presunta disposición superior y la exigencia de pagos indebidos, que oscilaban entre $ 1.500 y $ 5.000.

Tras el operativo Eslabón 98 se detuvo a 9 de los implicados en este proceso. Las investigaciones habrían determinado que serían 19 personas vinculadas a este delito. Por el delito de delincuencia organizada están imputados los 21 implicados en este caso.

Hasta el cierre de esta edición continuaban los trámites de evaluación médica del exgeneral Fausto T., previo a ser trasladado a un centro penitenciario. (I)