Dos mujeres rompen tradición en la Marina
La teniente de Navío Paola Ochoa y la teniente de Fragata Gabriela Urquizo son desde ayer las primeras mujeres paracaidistas de las Fuerzas Armadas (FF.AA.)
El logro de las infantes de Marina se dio tras aprobar el vigésimo curso de salto libre que inició en octubre de 2017 y finalizó el 16 de enero. El programa se realizó junto con otros 16 miembros de la entidad.
La teniente Ochoa, quien ingresó en la Escuela Superior Naval Cmdte. Rafael Morán Valverde, en 2003, consiguió en 2007 graduarse como Alférez de Fragata, obteniendo la primera antigüedad de su promoción.
La quiteña revela que desde muy pequeña vio los cielos como un objetivo. Ese anhelo apoyado por la familia se afianzó en 2010 cuando realizó cursos de paracaidismo, y así inició la consagración de su sueño.
La mujer mostró su alegría luego de que con sus compañeros esperaron la ceremonia de graduación que los avalaba como paracaidistas. El evento se desarrolló -con una sensación térmica ambiental de 35 grados- en la Base Naval San Eduardo, suroeste de Guayaquil.
La infante de 33 años, que vive en Machala, provincia de El Oro, ahora ve la vida con objetivos, y el próximo que desea cumplir es ser madre, su sueño más grande.
La paracaidista entiende la actividad como el control del ser y el desarrollo de las habilidades que cada persona puede llegar a tener. Esto no se trata de ser hombre o mujer, sino de demostrar las individualidades, indicó Ochoa, quien además es la primera mujer infante de Marina.
En la misma explanada, la teniente de Fragata Gabriela Urquizo trata de refrescarse del intenso calor, al mismo tiempo mostraba su alegría de saber que se enmarcó en la historia de la Armada.
La guayaquileña de 33 años se alejó de los halagos para ella y su compañera de aventuras e hizo un reconocimiento a la entrega, apoyo y respeto que demostraron sus camaradas de estudios en las clases que culminaron en Salinas, Santa Elena.
Urquizo es parte de las cuatro mujeres infantes de Marina con que cuenta actualmente la entidad.
La mujer es infante de Marina desde 2010, y la segunda oficial mujer en tomar esta decisión.
La madre de dos hijos (niña y niño) entiende que esto, lejos de ser un reconocimiento por un logro alcanzado, es una responsabilidad.
El acto protocolario terminó y las felicitaciones empezaron. Gabriela busca entre la multitud de compañeros de trabajo a su esposo, el teniente Humberto Velásquez.
Esto empezó como un proyecto ideado para que las mujeres de la entidad tengan las mismas oportunidades que los otros infantes, dijo el comandante Diego Ayala, director de la Escuela de Infantería de Marina, quien sentencia que este proceso no acabará.
Una prueba de ello es que en la preselección se inscribieron tres aspirantes, pero debido a los parámetros del curso ingresaron los de mayor puntaje, lo que no descarta en un futuro a los que fallaron en esta ocasión.
Ayala es el promotor del ingreso de las mujeres en el paracaidismo junto con el comandante del Cuerpo de Infantería de Marina, Julián Cajas, quien pasó al retiro.
El capitán de Corbeta Omar Vásquez, subdirector de la Escuela de Infantería de Marina, recordó que el curso tiene parámetros específicos a los que se deben adaptar los aspirantes sean hombres o mujeres y las infantes lograron cumplirlos.
Ahora Vásquez, quien fue el jefe del curso, cree que la constancia y la preparación serán el paso a seguir para que las paracaidistas puedan ejecutar los saltos libres operacionales.
Las militares fueron entrenadas por instructores del Cuerpo de Infantería de Marina, quienes se capacitaron en Estados Unidos bajo la supervisión de la United States Parachute Association (USPA). (I)
Las enseñanzas
Entrenamiento militar
Las paracaidistas cumplieron los mismos procesos que sus compañeros en el aprendizaje de temas teóricos y prácticos, basados en las técnicas de enseñanza de los siete cursos de la AFF que se realizaron de octubre a enero de este año.
15 saltos es el mínimo que cumplieron las dos infantes de Marina antes de graduarse.
Formación e instrucción
Las dos infantes de Marina en 2012 participaron en el curso de operaciones ribereñas.
