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El Telégrafo

Mundial Sub-17, la vitrina juvenil

Mundial Sub-17, la vitrina juvenil
28 de octubre de 2019 - 00:00 - Agencia EFE

El Mundial Sub-17, que ya fue “cuna” de consagrados como Ronaldinho Gaúcho, Andrés Iniesta y Neymar, nombres que sobresalen entre decenas de figuras de las anteriores 17 ediciones del torneo, continúa esta semana, evocando a los astros que dejaron su huella en la cita.

Desde el sábado, dos estadios de la ciudad de Goiania, uno de Vitória y otro de Brasilia, acogen hasta el 17 de noviembre el torneo que comenzó a disputarse en 1985 en China.Una de las máximas figuras que han surgido del Mundial Sub-17 es Ronaldinho Gaúcho, quien en el torneo de Egipto 1997 con su “magia” condujo a Brasil a la primera conquista orbital en la categoría, después de 12 años de participaciones.

En lo posterior, “Dinho” se convertiría en estrella de la Canarinha, campeona del Mundial de Corea del Sur-Japón 2002 y de los clubes por los que pasó, como el Barcelona, en el cual se consagró como el mejor jugador del mundo.

“El Mundial Sub-17 siempre será especial para mí. Me abrió las puertas de mi carrera profesional. Fui lo suficientemente suertudo para no solo participar, sino para ganarlo”, comentó Ronaldinho.

Otros brasileños que pasaron por el torneo y que conquistaron el mundo años después son “el Emperador” Adriano, quien ganó el título en Nueva Zelanda 1999; Marcelo, el lateral del Real Madrid, que estuvo en el de Perú 2005; y el portero Julio César, finalista en Ecuador 1995.

En Nigeria 2009 sobresalieron los hoy titulares de la Canarinha Casemiro, del Real Madrid; Philippe Coutinho, del Bayern Múnich; el portero Álisson, del Liverpool; y Neymar, del París Saint Germain.

En Italia 1991 se erigió como máximo artillero del torneo Adriano Gerlim, quien después no alcanzó la gloria de otros compatriotas, como sucedió con los españoles Borja Bastón, goleador en Nigeria 2009, y David Rodríguez-Fraile, cañonero en Egipto 1997.

Sin embargo, otros españoles surgidos del Mundial Sub-17 hicieron historia con la casaca roja y en los clubes que defendieron, como el legendario portero Íker Casillas y Xavi Hernández que defendieron a España en Egipto 1997.

El laureado Andrés Iniesta, exastro del Barcelona, apareció con Fernando “el Niño” Torres en Trinidad y Tobago 2001, nueve años antes de conducir en la cancha a la selección mayor que ganó el inédito título mundial en Sudáfrica 2010.

Dos años después, en Finlandia 2003, surgieron nombres para la selección de España como David Silva, ahora centrocampista del Manchester United, y Cesc Fábregas, elegido como mejor jugador del Mundial Sub-17, del que salió como el mayor anotador, con cinco tantos. El portugués Luis Figo inscribió su nombre en Escocia 1989.

En la lista de jugadores destacados figura igualmente Pablo Aimar, titular con Argentina en Ecuador 1995 y que este año retorna al torneo, pero como el técnico de la “Albiceleste”.

En Italia 1991 la estrella del sureño país era Juan Sebastián Verón y una década después, en Trinidad y Tobago 2001, fue Carlos Tévez, ídolo de Boca Juniors.

Italia, otra potencia del fútbol mundial, dejó para los recuerdos del Mundial Sub-17 a nombres como los de Alessandro Del Piero, en el torneo celebrado en su país en 1991, y en el siguiente, en Japón 1993, el del portero Gianluigi Buffon y del insigne Francesco Totti, capitán de la Roma.

En Japón 1993, el fútbol mundial vio por primera vez a Nuankwo Kanú, campeón con Nigeria, el país que más conquistó el torneo, con cinco títulos, y al anfitrión Hidetoshi Nakata.

México ganó el primero de sus dos títulos en Perú 2005 en una final con Brasil que tuvo a Giovani Dos Santos -de ascendencia brasileña- como mejor jugador y Carlos Vela como máximo goleador.

También fueron mundialistas sub-17 el estadounidense Landon Donovan, mejor jugador de Nueva Zelanda 1999; los alemanes Mario Götze, que estuvo en Nigeria 2009, y Toni Kroos, el más destacado de Corea del Sur 2007, torneo en el que también surgieron el belga Eden Hazard y el colombiano James Rodríguez, ambos en el Real Madrid.

En esta edición participarán 504 futbolistas juveniles, que pretenden dejar su huella y marcar un inicio productivo en sus carreras profesionales.

Los que buscan seguirlos

En este mundial brasileño también hay futbolistas que se presentan como las estrellas del futuro.
Ya demostraron su calidad en las rondas clasificatorias y también con sus clubes, pero la cita en Sudamérica será determinante.

Entre los nuevos nombres que aparecen destacan algunos. Por ejemplo, el japonés Jun Nishikawa, del Toko Gakuen de su país y pretendido por el FC Barcelona.

Él incluso fue convocado para jugar el Mundial Sub-20 pasado, que se disputó en Polonia, con 17 años cumplidos. Destaca por su técnica con el balón y su velocidad por la banda.

De este lado del mundo, por Brasil las miradas se posan sobre Talles Magno, delantero encarador que destacó en el Sudamericano de Perú.

Por Argentina está el volante creativo Matías Palacios. Él estuvo en el Sudamericano sub-15 de Argentina 2017, en el sub-17 de Lima 2019 y en el tradicional torneo sub-20 de L’Alcúdia en 2018.

El 21 de septiembre de 2018 se convirtió en el jugador más joven en debutar en la primera división con San Lorenzo con 16 años, cuatro meses y 11 días.

Ecuador no se queda fuera de la lista. En su plantilla tiene al goleador del torneo clasificatorio sudamericano, Johan Mina. Con seis tantos en el certamen fue una de las guías para que la Tricolor accediera a su quinto mundial en la categoría.

De figuras al olvido

Lograr consolidarse como el mejor jugador del torneo no significa que tendrá asegurada una carrera promisoria en el futuro.

El nigeriano Kelechi Iheanacho fue el goleador del Mundial 2013, que se jugó en Emiratos Árabes, con seis tantos en siete partidos. Su selección logró el título de campeón.

Su mundial le significó el fichaje por el Manchester City. Sin embargo, en dos años no pudo marcar la diferencia y fue vendido al Leicester, donde no actúa con regularidad.

El brasileño Anderson fue figura en el certamen de 2005, donde su selección logró el segundo lugar y ganó el Balón de Oro.

Pasó al Porto de Portugal y después al Manchester United, con algo de fortuna y luego su carrera fue en descenso y hoy actúa en el Adana Demirspor de Turquía.

Varios casos se han repetido y pocos han sido los futbolistas que con constancia y trabajo han mantenido su carrera. (I)

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