Sus estudios de Orientación Familiar, Ingeniería Comercial, Comunicación y Nutrición han hecho de la guayaquileña Rosanna Queirolo una mujer muy versátil. Se ha destacado en distintos campos, tanto en medios de comunicación, como en la política y las pasarelas (esta última faceta desde hace 25 años).

Fue presentadora de la serie ‘Decisiones’, de Ecuavisa.

Trabajó como asambleísta nacional con el partido Alianza PAIS. Además se ha desempeñado como modelo, nutricionista y orientadora familiar; además de ser una destacada deportista, es madre de cuatro hijos: Daniela, María José, Rodolfo y Sebastián (tres de ellos viven en Estados Unidos, el otro en colegio).

Desde hace un año y medio, la también ingeniera comercial, graduada en Lesley University de Cambridge (Massachussets) se desempeña como diseñadora y empresaria de modas, con colecciones de ropa y accesorios femeninos, que conjuntamente con Megamaxi, presenta bajo el nombre de Blash by Rossana Queirolo que exhibe en Guayaquil, Quito y Ambato. Su sexta colección se llama Soho y está inspirada en las calles de Nueva York, ciudad que visita frecuentemente.

Pese a las grandes tareas que realiza diariamente, tiene tiempo para practicar deportes como la natación, ciclismo y atletismo. De hecho, relata quien siempre ha estado inmersa y eso le permite lucir una figura envidiable a sus 40 y tantos años, más un rostro que en su momento fue comparado con el de la exTop Model estadounidense Cindy Crawford.

¿Qué tal le va en su etapa como diseñadora de modas?

Estoy contenta y agradecida con la mujer ecuatoriana que ha confiado en mi propuesta. Blash tiene realmente todo, como pantalones, zapatos, sandalias, abrigos, faldas, blusas, sombreros, bufandas, accesorios y demás.

¿En que se inspira para crear esas piezas?

En arte. Cada colección tiene una inspiración distinta, por ejemplo la que presento actualmente la hice enfocándome en el barrio Soho de Nueva York. Yo viajo mucho allá porque mi hija mayor vive en esa ciudad y estudia Diseño de Modas. Me inspiré en ese lugar porque me encantó el ambiente, los colores y cómo la gente estaba vestida. Mis diseños son para todos los gustos: bajitas, altas, gorditas y flaquitas, para mujeres desde los 20 a 45 años. La mano de obra de esta empresa es ciento por ciento nacional.

¿Actualmente se dedica completamente a esta empresa?

Sí y estoy trabajando para la siguiente colección que sale en noviembre con ropa y accesorios más coloridos. Lo que queremos es traer la moda internacional a nuestro país.

¿Siempre quiso diseñar?

Cuando me desvinculé de la Asamblea sentí las ganas de crear mi propia marca, que nació en conjunto con mi hija Daniela, quien era la más entusiasmada. En mi casa se respira mucho arte, y el diseño de modas siempre ha estado presente. Mis dos hijas van a ser diseñadoras. La mayor ya está estudiando y se graduará en una de las mejores universidades del mundo, en Parsons (Nueva York); y la de 15 años viajará este mes a estudiar los tres últimos años de colegio en un centro donde solo reciben a artistas. Las dos son muy talentosas y creativas.

¿Tiene propuestas televisivas?

Tengo planes de regresar a la televisión eventualmente, pero algo producido por mí que tenga que ver con salud y deporte, porque soy muy deportista. Además tengo mis cápsulas de salud en la Radio Forever, donde doy consejos de cómo alimentarte, de los beneficios de ciertos alimentos, sus vitaminas y minerales, etc.

¿Otros proyectos?

En octubre sale mi línea de ropa deportiva con el nombre Blash Active. Todo lo que tenga que ver con la correcta alimentación y el ejercicio es algo que me gusta y corre por mis venas. Siempre he sido deportista y soñaba con tener esta línea de ropa, porque es en lo que más dinero gasto. Desde que tenía 15 años mi presupuesto se ha ido en ropa deportiva porque he sido triatleta olímpica y maratonista. Las últimas tres semanas participé en competencias, dos de 10 kilómetros y una de cinco. Pero más me dedico al atletismo, al voleibol de arena y a las pesas.

¿Cuántas horas de ejercicios?
Dos horas diarias, de 7 a 9 de la mañana religiosamente, excepto cuando viajo, y cuando lo hago llevo mis zapatos de caucho y si voy al mar llevo algo para nadar.