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El café no solo es caliente, también se lo toma cremosamente helado

El café no solo es caliente, también se lo toma cremosamente helado
05 de mayo de 2013 - 00:00

Cuando la temperatura comienza a elevarse y el calor es el protagonista, las bebidas frías o heladas nos alivian y refrescan. Para los amantes del café y también para los que no lo son tanto, hay una buena solución para seguir degustando el sabor del café, pero sin sufrir el calor que provoca tomarlo caliente.

Y es ahora que no basta con saborearlo en caramelos elaborados con esencia de café, sino que también podemos refrescarnos con un helado preparado en casa.

Para hacer un delicioso helado casero con café necesitaremos 50 ml de café descafeinado, 500 ml de leche sin lactosa, 3 yemas de huevo, 100 gr de azúcar y una pizca de vainilla en polvo.

1.- Primero haremos un café, use el que tiene en casa o el que más le guste. Separamos las yemas de las claras, estas últimas las guardamos para hacer otra receta.

Ponemos la leche al fuego con una pizca de vainilla en polvo, mientras tanto mezclamos las yemas con el azúcar, esperamos a que la leche empiece a hervir, le bajamos el fuego y añadimos el café.

Para que el huevo no cuaje, añadiremos una cucharada de leche caliente a las yemas con el azúcar, le añadimos varias cucharadas, mezclamos muy bien e incorporamos esta mezcla al resto de la leche que tenemos a fuego lento.

Seguimos removiendo con una cuchara para que no se pegue, esperando a que vuelva a hervir, removemos un rato y apagamos. Hasta aquí hemos preparado unas natillas de café. Esperamos a que las natillas se enfríen y las metemos en la nevera para usarlas más tarde.

2ª parte. (Pasadas tres horas)
Sacamos el helado líquido de la nevera, lo vertemos en la heladora y la dejamos trabajar durante unos 15’, el resultado un helado de café delicioso.

Servimos unas bolas con unos barquillos y el resto los distribuimos en recipientes para meter en el congelador.

Estos helados son muy ligeros, ya que no llevan nata. La misma le da más cuerpo y cremosidad, pero tiene lactosa y más calorías.

Este helado de café es bajo en grasa, así que puede comer tanto como quiera, ¡pero cuidado con los barquillos… esos sí engordan!

- Podemos hacer helados diferentes exactamente de la misma forma, pero con diferente aromatizante. Hoy es de café, pero nadie nos quita para que lo hagamos de avellanas, añadiendo praline de avellanas.

- El helado de café sirve como postre montado en un molde tipo flanera, decorado con chocolate en polvo. Para apreciar su sabor es mejor que no esté demasiado congelado. Puede dejarlo unos minutos a temperatura ambiente. Si quiere puede servir con un poco de licor de café o manjar.

- Esta receta la pueden disfrutar grandes y chicos. Es muy saludable. Las personas que sufren de hipertensión consultar con un médico sobre las dosis para evitar el abuso.

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