Sábado 26 de septiembre de 1985. Marty McFly se levanta de su cama, vestido con jeans sujetados por tirantes y una camisa blanca a cuadros. Cree que ha tenido una pesadilla, pero aún así baja al comedor donde su familia está desayunando.

Sale hacia el porche de su casa y se topa con la camioneta negra que siempre ha soñado. La contempla, fantasea un poco con ella hasta que una dulce voz lo distrae.

-¿Me lleva a pasear señor?
-Jennifer, dichosos los ojos que te ven.
-Marty, pareciera que no me hubieras visto en más de una semana.
-Lo fue...
-¿Te sientes bien? ¿Está todo bien?
George y Lorraine McFly, los padres de Marty, se asoman sigilosamente a la puerta de la casa que conduce a la calle, mientras ambos adolescentes se toman la mano y se miran fijamente a los ojos. Marty alcanza a verlos.
-Oh, sí. Todo está maravillosamente bien.
Están a punto de besarse en los labios, pero el sonido de un auto que se detiene a toda velocidad los interrumpe.
-Hey, Doc, ¿qué pasa?, dice Marty al científico Emmett Brown, su compañero de aventuras, quien desciende de un DeLorean y ataviado por un extravagante traje amarillo.
-Marty, debes volver conmigo...
-¿A dónde?
-De vuelta al futuro...

Y Marty McFly es el personaje estelar de la trilogía ‘Volver al futuro’, que dirigió Robert Zemeckis y que protagonizó Michael J. Fox entre 1985 y 1990.

Ahora el actor canadiense, quien cumplió 52 años el pasado 9 de junio, está de regreso, pero no al futuro, sino a la televisión, el medio que lo vio nacer como intérprete en 1977 con la serie ‘The Magic Lie’.

Fox, quien padece de Parkinson desde 1991, es el protagonista de una serie que lleva su nombre y que curiosamente se centra en su enfermedad de la vida real.

El pasado 26 de octubre la NBC estrenó ‘The Michael J. Fox Show’, una serie en la que su actor estelar encarna a Mike Henry, un periodista y presentador de noticias que debe dejar su puesto cuando le diagnostican Parkinson.

Mike deja su carrera en ‘stand by’ y aprovecha el tiempo en pasar con su familia, además de someterse a los tratamientos necesarios que le permitan regresar a la pantalla chica.

Cinco años después, tras conseguir medicamentos que controlan su enfermedad, Mike vuelve al ruedo, pero ahora debe lidiar con el hecho de que Ian, Eve y Graham, sus hijos (interpretados por Connor Romero, Juliette Goglia y Jack Gore), son más grandes y afrontan situaciones comunes de los niños y adolescentes, aunque tiene la ayuda de su esposa Annie (Betsy Brandt).

Harris Green (Wendell Pierce), su antiguo jefe, aprovecha esta oportunidad para contar con él nuevamente en televisión.

Después de muchos intentos fallidos, la familia de Mike, ansiosa porque vuelva al trabajo y mantenerlo fuera de casa, finalmente consigue que el presentador acceda a aceptar la oferta de Green.

Ahora su vida vuelve a ser la de siempre: hacer malabares (dentro de sus posibilidades como víctima del parkinson) en su casa, su familia (incluida su hermana Leigh, personificada por Katie Finneran) y su carrera.

Fox no solo vuelve a la televisión, su retorno también es a la NBC, la primera cadena estadounidense que lo acogió cuando llegó desde Canadá. Allí el actor, que apenas mide 1,64 metros de altura, alcanzó fama en ese canal como Alex Keaton, el adolescente de ideología política en la serie ‘Family ties’ (‘Lazos de familia’) entre 1982 y 1989.

La serie actual es escrita y producida por Sam Laybourne (de la serie ‘Cougar Town’) y Will Gluck (de la película ‘Easy A’).

Salvo unas esporádicas apariciones en capítulos de otras series, Fox había dejado el cine y la televisión en 2001 tras cuatro años en la serie ‘Spin City’ donde era el teniente Mike Flaherty.

A Michael J. Fox no solo se lo conoce por la trilogía de ‘Volver al futuro’. Es más, su época más productiva en el cine fue durante la década del 80 con filmes como ‘Teen Wolf’ (1985), una adaptación cómica del ‘Hombre lobo’. Ahí interpreta a Scott Howard, un basquetbolista colegial que se enamora de la novia de su rival, quien lo considera un debilucho. Scott descubre dolorosamente que él y su padre son licántropos, pero al final acepta su situación con una actitud sobrada, aunque eso lo arriesga a perder a sus verdaderos amigos.

Otra de sus películas importantes es ‘The secret of my success’ en la que personifica a Brantley Foster, un universitario recién graduado como financista en Kansas, que viaja a Nueva York para probar fortuna como un ejecutivo, pero que inicialmente es contratado como cartero hasta que se hace pasar por un tal Carlton Withfield porque un tío político suyo lo quiso así. Lo que él desconocía era que la esposa de él es la verdadera dueña de la empresa y lo convierte en el mayor accionista con la ayuda de Christy, otra ejecutiva de la que Brantley está enamorado.

En la década del 90 sobresalió en ‘Greedy’ (1994) junto con el experimentado Kirk Douglas. Para entonces Fox ya padecía la enfermedad pero no la había confesado en público. Recién lo hizo en 1998 y desde entonces se convirtió en un activista y donante mayoritario para la investigación científica de este mal. De hecho, el año pasado entregó 250 millones de dólares para este objetivo.

Casado desde 1988 con Tracy Pollan, actriz que interpretaba a su novia en ‘Family ties’, Fox también ha aportado con su voz para varias cintas, entre ellas las de ‘Stuart Little’, y además ha sido sometido a una talatomía, es decir una operación en la base del cerebro para contrarrestar su Parkinson.

Fuera de eso Fox también controla su dolencia con un medicamento llamado Sinemet y eso es lo que le permite ‘volver a’ ...la televisión.

ALGO MÁS

Michael J. Fox tiene cuatro hijos: Sam Michael, Aquinnahy, Schuyler y Esmeé.

El papel de Marty McFly siempre fue suyo, pero entonces trabajaba en ‘Family Ties’.

Eric Stolz estuvo a punto de reemplazarlo, pero Robert Zemeckis lo despidió.