Miguel Gallardo Romero todavía conserva algo de aquella pinta rebelde que proyectaba con su hermano Homero en la década del 60, con el grupo Los Hippies. “Miguicho”, como su familia y panas lo conocen, lleva una cola de caballo con la que sujeta su melena  azabache de rockero perteneciente a la ‘vieja guardia’, mientras que Homero, su eterno cómplice, ya luce el cabello entrecano.

Y es que la imagen de la banda era realmente “hippie”, con pantalones acampanados, a veces con sandalias y camisas tipo batonas de estampados coloridos. “Miguicho”, que ahora tiene 61 años y toca la guitarra, lucía patillas largas que se juntaban con un espeso mostacho; mientras Homero, de 58 y pianista,  prefería el uso de los flequillos.

Ambos son los patriarcas del clan Gallardo. Los hijos de “Miguicho”:  José Miguel (“Michito”), Homero (“Ringo”) y Michelle Gallardo Gutiérrez tocan piano, guitarra y bajo, respectivamente. Lily, la hermana de ellos, canta, pero prefiere dedicarse más al arte escénico. Por el lado de Homero está su hijo Miguel Alfredo Gallardo Menéndez (“Ricky”), que es baterista.

La historia del clan empezó con los Gallardo Romero en Piñas, provincia de El Oro. Allí Miguel Gallardo Íñiguez, un médico que tocaba el piano y otros instrumentos por ‘hobbie’ le transmitió el ‘bichito’ musical a sus hijos. Primero a Homero, el menor, que a los seis años aprendió a tocar el piano. “Miguicho”, pese a ser mayor, se involucró en la música recién llegado a la adolescencia, cuando se mudó desde Piñas hacia Urdesa, en Guayaquil. Tenía 15 años.

El recuerda que tocaba el tambor en la banda de guerra del colegio Espíritu Santo, mientras que en casa tocaba lo que encontraba, incluyendo tapas de ollas. Como su padre lo vio, decidió regalarle unos micrófonos viejos y una guitarra de palo.

Durante la adolescencia de los hermanos Gallardo Romero también se desarrollaron los perfiles de técnico (Homero) y de empresario (“Miguicho”), que años después dieron forma a Casa Musical Gallardo y Homega. Relata “Miguicho” que cuando era un muchacho tuvo un amplificador viejo, que en una ocasión encontró desarmado. Fue Homero, quien desbarató el amplificador -cuenta él- para llevárselo de viaje y volverlo a ensamblar.

“Miguicho” es el que  más habla en la familia. Cuenta que acudía al restaurante White House, que quedaba en las calles Clemente Ballén y Chimborazo. En esa época conoció a Enrique Alín, uno de sus primeros amigos en la música, al que recuerda como “un chinito que un día pasó por ahí con un bajo sin piezas”.

Al final compraron un instrumento nuevo en J.D. Feraud Guzmán y surgió  el grupo Streyker’s, la primera agrupación de “Miguicho” junto con Héctor Napolitano. Fue el antecedente para Los Hippies, aquella banda psicodélica de los 60 que contrastaba con el rock comercial de Los Corvetts, sus entonces adversarios. Homero recuerda una ocasión en que no lo dejaron entrar a una discoteca (Círculo, que quedaba junto al punte Cinco de Junio) para tocar con la banda. Solo tenía 13 años y, de paso usaba pantalón corto.

Los Hippies grabaron un par de discos sencillos. Uno de ellos era Uno, la versión en español de One, original del grupo Three Dog Night, y Dame, dame amor bueno, su adaptación de Gimme Gimme Good Loving, de la banda The Crazy Elephants.

En vivo las tocaron durante festivales en los que utilizaban una escenografía que incluía inciensos y luces oscuras; pero por los excesos de la mayoría de las bandas, hubo un decreto por parte del entonces alcalde Assad Bucaram en que se prohibía estos espectáculos públicos. Era la época previa a la creación del grupo Boddega, en 1971, con el que Alín compuso la inédita Protesta contra el mundo.

Boddega nació precisamente en una bodega, cuyo dueño era Carlos “Cucho” Roggiero, que había traído unos amplificadores y otros aparatos técnicos por encargo de los Gallardo Romero, que eran la base del grupo en el que también estaban Alín y Gelo Cárdenas; mientras que la idea psicodélica inicial se convirtió en algo pop comercial, pero con influencias de Carlos Santana. La banda se disolvió hace 31 años. Un año después de que surgió Casa Musical Gallardo.

“Michito” y “Ringo”, los hijos de “Miguicho”, formaron Maddera en 2000 hasta 2006. Con 25 años, el primero de ellos actualmente es uno de los docentes más jóvenes de piano en la Universidad San Francisco, en Quito. Empezó a los nueve años con un profesor hasta los once. Luego el ex conductor televisivo de Juega conmigo y Después de clases, estudió en la universidad en la que actualmente es profesor y en Berklee, Estados Unidos.

Actualmente forma parte de una banda de jazz, sin nombre específico, que suele tocar en Diva Nicotina. Su hermano “Ringo” es un guitarrista, de 23 años, que aún estudia en Berklee. Lidera su grupo en Miami que se llama The HG Project. Su hermana Michelle, de 22 años,  se formó en piano con “Michito” y luego en guitarra, pero actualmente toca el bajo. Miguel Alfredo o “Ricky”,  hijo de Homero Gallardo Romero, fue baterista del grupo punkero Grave Error.

Todos ellos forman el clan Gallardo, que surgió en Piñas hace casi cinco décadas, con muchas historias que se reflejan en las fotos amarillentas de periódicos que conservan en casa y en  redes sociales como Facebook.