El “doctor” recorre con sus manos todo el voluptuoso cuerpo de la “ingenua” paciente. Con las gesticulaciones de su rostro lo que menos piensa él es en el bienestar de aquella muchacha piel canela que yace boca a bajo en una camilla.   

-¿Cuánto le debo doctor?

- No me debe nada, aunque me ¿podría dar su número de teléfono?... Es para saber cómo evoluciona su dolencia- responde el dizque galeno, que en realidad es solo el enfermero y  aprovecha las prolongadas ausencias del doctor Molina,  su jefe, para ocupar su lugar.

Y el “Molina trucho” tiene una “amigovia” y una paciente montubia quien le propone la paternidad del hijo que espera para desligarse del verdadero progenitor: un mafioso. Y para ahondar el lío en el que está inmerso, el verdadero doctor Molina está vinculado con aquel malandro.

Es la historia de enredos que los libretistas Alfredo Piguave, Carlos Valdivieso y Carlos Gómez plantean en “Quién engaña a quién”, una de las obras picarescas que forman parte del programa “Puro teatro”, que Gama TV estrenó en junio y se transmite los domingos desde las nueve y media de la noche con las participaciones de Mao House, Pamela Palacios, Carolina Jaume y Martín Calle como actores fijos. Marcelo Gálvez y otros intérpretes invitados  completan el “staff” escénico.

Andrea González y Andrés Garzón, productora y director escénico de “Puro teatro”, respectivamente, reconocen que no es una idea nueva, aunque coinciden en que el objetivo es incentivar al público para que acuda a las salas de teatro, a través de las interpretaciones en vivo, pero transmitidas por la televisión.

Aquel recurso surgió en Latinoamérica en 1959 con el español Manuel de Sabatini cuando residía en Argentina. Luego él mismo trajo la idea a Ecuador en la década del 80 con actores como Enrique Fuentes, Enrique Pacheco y otros en un espacio que se llamó “Teatro como en el teatro” y que entonces transmitía Telecentro (hoy TC Televisión).

En Europa ese recurso nació en 1965 en Televisión Española, a través del espacio “Estudio 1”, que terminó su primera etapa en 1995 y se reactivó cinco años después hasta la fecha, pero con clásicos de los dramaturgos españoles Pedro Calderón de la Barca, Tirso de Molina, Félix Lope de Vega, Benito Pérez Galdós o José Zorrilla, que mezclaban con las obras de William Shakespeare, Oscar Wilde o J.B. Priestley. De hecho, el regreso  de “Estudio 1” ocurrió con una obra de él: “Yo estuve aquí antes”.

González explica que la propuesta de “Puro teatro” es comedia de enredos. “Es lo que le llega a la gente”, dice la productora quien acepta que no hay un gran público que aprecie obras serias. “Se trata de un proceso para que primero la gente acuda al teatro y en un futuro ofrecerle otro tipo de obras. Además, la televisión es un medio masivo en el que su público tiene otras costumbres y expectativas”, indica.

“Puro teatro” empezó a gestarse en noviembre pasado y como proyecto fue aprobado en marzo pasado, mientras que al mes siguiente empezaron las grabaciones.

Garzón, de amplia trayectoria en el teatro y la televisión, dice que “el programa tiene un banco de historias porque apenas existe una semana entre la representación de una y otra. Hay cuatro actores fijos y un par de invitados, que no siempre están en los ensayos por los múltiples compromisos que tienen”.

El actor y director agrega que los actores fijos ensayan la obra con los personajes asignados para los invitados. Ellos observan y copian los personajes y los reproducen con sus propias gesticulaciones para la grabación, que cuenta con una escenografía muy semejante a la de una sala de teatro, con público incluido. A las nueve de la noche de cada viernes cuatro camarógrafos captan los enredos de doctores, mujeres voluptuosas, mafiosos, maridos traicionados y quién sabe qué otros personajes pintorescos.