Nunca una selección ecuatoriana de fútbol tuvo un inicio de eliminatorias mundialistas tan brillante. El combinado dirigido por Gustavo Quinteros ganó los cuatro encuentros que disputó este año en el torneo clasificatorio al Mundial de Rusia 2018 y es líder solitario en la tabla con 12 puntos, es decir tuvo una efectividad del 100%.    

Pero el equipo dirigido por Quinteros está demostrando que su fútbol no se trata solo de resultados sino de un nuevo estilo de juego que explota al máximo el potencial técnico de sus jugadores en todas las zonas de la cancha. “El equipo está trabajado, el grupo sabe que tiene que jugar de la misma manera del minuto 0 al 90, más allá de los resultados temporales”, dijo Quinteros tras la victoria 2-1 ante Uruguay.

La plantilla de jugadores que utilizó Quinteros en los cuatro primeros partidos de eliminatorias no varía en mucho a la última alineación que tuvo el exseleccionador Reinaldo Rueda en el Mundial de Brasil. Las únicas variantes fueron las de Pedro Quiñónez, en el centro de la cancha, y la de Miler Bolaños, en la delantera. El resto de jugadores son los mismos que representaron a Ecuador en la copa del mundo.

La BBC de Londres se hizo eco del buen rendimiento de la selección ‘tricolor’ y en un artículo publicado el pasado 12 de noviembre destaca que aunque Quito ha sido un verdadero fortín para la ‘Tri’, este ya no es el único recurso que tiene el combinado nacional para conseguir la clasificación a su cuarto mundial.      

El mismo medio británico reveló que antes de iniciar las eliminatorias pronosticaron que Ecuador terminaría el 2015 en la séptima posición, pero reconocieron que se equivocaron. La BBC también explicó que con el nuevo formato de eliminatorias, todas las selecciones que ganaron sus primeros tres encuentros de manera consecutiva lograron la clasificación mundialista.

Uno de los aspectos con los que la selección dirigida por Quinteros tuvo que lidiar al inicio del torneo eliminatorio fue con las ausencias. Los dos Valencia (Énner y Antonio) sufrieron sendas lesiones y quedaron fuera de la selección a su debido momento. Miler Bolaños y Fidel Martínez fueron los encargados de cubrir los espacios y lo hicieron de excelente manera, a tal punto que aportaron con goles importantes.

Marcelo Trobbiani, antes de hacerse cargo de River Ecuador, en una entrevista con este Diario aseguró que por el nivel de jugadores y capacidad de su técnico Ecuador debería clasificar al Mundial de Rusia, pero que eso dependerá de cómo plantea los partidos.

Incluso se adelantó y señaló que por la rapidez de sus volantes y delanteros debería jugar presionando varios metros adelante y jugar por las bandas al contragolpe. Y antes del partido frente a la ‘Albiceleste’ reveló: “Yo creo que Ecuador puede hacerle daño a Argentina”.   

Dos técnicos que coincidieron en que la llegada de Quinteros a la selección fue acertada fueron Luis Soler y Alfredo Encalada.      

Ambos técnicos consideran que una de las ventajas que tiene Quinteros para sacar adelante su proyecto deportivo es la plantilla de jugadores. Según Soler, la experiencia con Ecuador no se pudo comparar con la que tuvo en Bolivia debido a la diferencia de los seleccionados. Mientras que Encalada destaca la rapidez del combinado nacional al considerarlo como uno de los más rápidos de Sudamérica.   

Pero el comienzo de Quinteros en la dirección técnica de la ‘Tri’ tuvo algunos altibajos que pusieron en duda su continuidad. De los cuatro partidos amistosos que disputó antes de la Copa América, perdió dos, ganó uno e igualó otro. Y en el torneo continental que se realizó en Chile, cayó en dos partidos y salió victorioso en uno, para quedar eliminado en la fase de grupos.

Luego del torneo, Quinteros no se escondió ante los medios de prensa del país y afrontó la pobre actuación de la selección nacional con un análisis completo de la participación en Copa. Aunque habló poco de las ausencias -por lesión o por pedido- confesó que estas hicieron falta, especialmente para tener más variantes de dónde elegir. También reveló que “esperaba un poco más” de los tres partidos, frente a Chile, Bolivia y México, y que solo en el último cotejo “terminó jugando parecido” a lo que desea. Y finalmente aseguró que con lo demostrado en Chile seguirían evolucionando futbolísticamente. “Jugar más en asociado y en el campo rival, aprovechar más los extremos. Nos faltó cambio de orientación del juego, empezábamos en un lugar y terminábamos en otro. Son aspectos que te dan los partidos y los entrenamientos. Automatizar eso es importante, sobre todo para jugadores como Jefferson Montero, Renato Ibarra, Antonio Valencia, Ángel Mena o Jonathan González, con ellos necesitamos aprovechar más los espacios; provocar espacios. Es un tema de perfeccionar trabajo”, explicó Quinteros.

Y sobre el grupo de jugadores, sin dar mayor explicación de los problemas internos que se vivieron a finales de 2014, sentenció: “Fue bueno lo que hablamos con el grupo y los temas que hemos topado. Hay que transformar un grupo de trabajo para que todos estén contentos y felices”.

Luego vino el último encuentro amistoso, antes del debut en eliminatorias. El 8 de septiembre, Ecuador recibió en el estadio Olímpico Atahualpa de Quito a su similar de Honduras, a quien ya había vencido en el Mundial de Brasil. Ese día los dirigidos por Quinteros fueron altamente superiores a los ‘catrachos’ e invitaron a los hinchas a soñar con un nuevo estilo de juego que podría acercar a Ecuador a su cuarto mundial. La ‘Tri’ venció 2-0 y más allá del resultado, el sistema de presión y ataque comenzó a visualizarse; las estadísticas indicaron que Ecuador tuvo el 66% de la posesión del balón, remató 22 veces al arco rival y generó 14 tiros de esquina, dominando completamente a Honduras.

Cuando parecía que Quinteros encontraba el sistema correcto para enfrentar en el debut a Argentina, el DT se lesionó en un partido de fútbol de amigos. Tras ser sometido a una operación, el estratega apareció en público con muletas y sobre una silla de ruedas eléctrica. Así dirigió las prácticas y los partidos de la ‘Tri’.

Luego llegó uno de los momentos más importantes en la historia del fútbol ecuatoriano: venció 2-0 a Argentina en el mismísimo estadio Monumental de Buenos Aires. Ecuador solo tuvo el 40% de la posesión de la pelota, pero fue contundente y preciso. Aunque Antonio Valencia fue la figura del partido, gracias a su potencia y rapidez por la banda derecha y su disciplina para apoyar en la marca por el centro de la cancha, fue el juego colectivo lo que impidió que los subcampeones del mundo pudieran descifrar el sistema táctico de Quinteros. En la segunda fecha la ‘Tri’ tuvo que superar no solo el cerrojo defensivo de Bolivia, sino también al pésimo estado de una cancha inundada de agua debido a la lluvia que afectó a Quito ese día. Ecuador derrotó 2-0 a Bolivia y seguía en la cima de la tabla de posiciones.    

Después llegó Uruguay, con quien compartía el primer lugar de las eliminatorias. La misión de  Ecuador era demostrar que las dos victorias -ante Argentina y Bolivia- no eran producto de  la suerte y ante un estadio Atahualpa repleto lo venció 2-1 con goles de Felipe Caicedo y Fidel Martínez. El último encuentro, ante Venezuela, confirmó el buen momento de Ecuador y con un juego sólido en la media cancha y rápido en el ataque, el equipo de Quinteros sumó su cuarta victoria, con una goleada 3-1 en Cachamay. (I)