En los cinco primeros meses de este año, unos 1.800 agricultores de la Costa y Sierra han recibido 900 mil dólares de indemnizaciones del seguro agrícola por afectaciones a sus cultivos, causadas principalmente por la sequía.

Los pagos han sido canalizados a través de QBE Seguros Colonial, que administra los fondos del seguro agrícola, cuya póliza  es subvencionada en un 60% por el Gobierno y el 40% restante asumido por los agricultores.

El gerente general del departamento agropecuario de QBE Seguros Colonial, Esteban Pico, indicó que  el mayor porcentaje del pago de las indemnizaciones, en 2011, se ha efectuado a agricultores de la Costa por afectaciones a los cultivos provocadas por la sequía. También a los productores de la Sierra por eventos como heladas, granizadas y exceso de lluvias,  que han dañado los cultivos en esa región.

Al momento la aseguradora realiza un examen para cuantificar posibles  indemnizaciones que deberá  pagar por las  pérdidas de cultivos que se han presentado en la última cosecha, pero el informe estará listo a mediados de julio, cuando culmina la siega.

Este seguro  cubre un porcentaje de los costos de producción en casos de pérdidas causadas por fenómenos climáticos, plagas o incendios.

Desde mayo de 2010 en que fue creado el seguro agrícola, 9.000 agricultores han asegurado sus cultivos, principalmente  de maíz, arroz, y papa.  Para este año, la compañía espera  duplicar esa cifra o al menos llegar a  17.000 asegurados. 

Pico, en una conferencia en la ESPAE - ESPOL, indicó que las provincias con más asegurados son Los Ríos, Guayas, Manabí, Loja, Carchi, Chimborazo y Cotopaxi. Este servicio aún no se ofrece a las provincias de la Amazonia.

Los cultivos que se puede asegurar son 16: arroz, papa, trigo, maíz duro, maíz suave, cebolla, tomate, caña de azúcar, cacao, brócoli-coliflor, soya, piña, palmito, banano, palma y fréjol-arveja.

El seguro está dirigido para los grandes, medianos y  pequeños agricultores; pero debido a la baja rentabilidad que tiene este tipo de negocios   la aseguradora ha tenido que luchar mucho  para difundir este servicio, mencionó Pico.
“El tema del costo debe acabar porque este seguro es subsidiado. A pesar de los beneficios  hay que invertir mucho en difundir  sobre la estabilidad que  pueden proveer los seguros”, dijo el ingeniero agrónomo.

Aunque el seguro agrícola subsidiado se implementó hace un año, este tipo de servicios existe desde hace 14 años en el país y QBE Seguros Colonial es la única firma que lo ofrece.

Para la investigadora y profesora de la ESPAE, María José Castillo, este seguro  es   una herramienta eficiente para minimizar los riesgos  de pérdida de las cosechas ante cualquier  acontecimientos catastróficos.

La investigadora mencionó que  lamentablemente en Ecuador este tipo de contratos  no se ha desarrollado porque existen problemas  tanto en la demanda como en la oferta.

En el caso de la demanda, Castillo mencionó que en el país no hay  una cultura de seguros y existe cierto grado de dificultad para comprender  los reales beneficios de este servicio. Por el lado de  la oferta, los inconvenientes se  centran en  el deficiente nivel tecnológico de los agricultores,   lo cual aumenta la siniestralidad de las cosechas y el valor de la prima.

Entre los cultivos asegurados, la papa tiene la prima más alta, de 7,5% del costo de producción, porque es de mayor riesgo, mientras que el arroz y maíz están entre un 5% y  8%; la tasa varía de acuerdo con la región, el rendimiento y ciclo del cultivo.

A pesar de que el tema es aún incipiente en el país, Castillo aspira a que a mediano plazo 30.000 agricultores opten por el seguro agrícola, ya que la tendencia mundial sugiere  que este es buen instrumento para garantizar la seguridad alimentaria.