Los miembros de los directorios de las Federaciones Ecuatorianas por deporte que surgieron a raíz de la intervención del Gobierno a los organismos deportivos, acordaron renunciar a sus cargos para evitar un bloqueo internacional a la participación de deportistas.

Lo único que debe dilucidarse, en el caso de convocar a nuevas elecciones en las federaciones, es cuál organismo debe llamar a las nuevas votaciones. Eso lo resolvería la nueva comisión internacional.

Tras el anuncio del Comité Olímpico Internacional (COI), la semana pasada, respecto a estudiar sanciones a los comités olímpicos nacionales con injerencia del Estado en el movimiento olímpico, los directorios de las federaciones intervenidas firmaron un acuerdo en el que se comprometen a respaldar cualquier petición del Gobierno ecuatoriano.

La decisión es poner los cargos a disposición y respaldar al Presidente de la República y al ministro del Deporte, José Francisco Cevallos.  

Fernando Cedeño, titular de la Federación Ecuatoriana de Lucha, citó que la voluntad de los directivos es solidarizarse con el Gobierno, pues a fin de cuentas, los nuevos directivos cumplieron un proceso legal que, desde el punto de vista del COI y de las federaciones internacionales no es válido.

“Nosotros cumplimos una ley aprobada por las autoridades legislativas ecuatorianas, tenemos la razón y renunciaremos si es necesario porque lo más importante son los deportistas”, dijo Cedeño.

Alejandro Blanco, mediador del COI, arribará al país este viernes, para sesionar el sábado con el ministro Cevallos. El primer paso de la comisión, antes del 15 de junio, es determinar los procedimientos y plazos del proceso electoral.

Cevallos adelantó que cada federación internacional enviará un delegado. Debe definirse  cuáles federaciones deben ser evaluadas primero: las intervenidas, las intervenidas que no eligieron directorios o las no intervenidas.