Posicionado como un club que invierte en la formación o consolidación de futbolistas (más de 1 millón de dólares), el siguiente objetivo de Independiente del Valle es abrir nuevos mercados y ahora le “apunta” al asiático. Con ese propósito, cuatro de sus jugadores juveniles se unieron al Club Asan H FC de la primera B de Corea del Sur.

Édison Quiñónez, Wilson Morales, Marco Ramos y Jefferson Orejuela viajaron el miércoles pasado a Honduras, donde el Asan comenzó una gira de partidos amistosos por Centro y Sudamérica. Ese club también estará en Colombia, Venezuela y Ecuador, a donde arribará en febrero para medirse con Barcelona e Independiente del Valle.

Santiago Morales, gerente de Independiente, confía en que los elementos enviados superen con éxito las evaluaciones del conjunto asiático y eso les permita concretar una o más transferencias.

Si bien en la actualidad no se autocalifica como el principal proveedor nacional de futbolistas, la venta de jugadores a clubes nacionales o extranjeros convierte al combinado de Sangolquí en la vitrina de juveniles más importante del país.

Desde su ascenso en 2009 a la primera A y su presencia en esa división desde 2010, Independiente negoció los traspasos de Jefferson Montero, al Villarreal de España; Juan Cazares, a River Plate de Argentina; Joao Rojas, al Morelia de México; Narciso Mina, Carlos Grueso y José Ayoví, a Barcelona de Guayaquil, y Daniel Samaniego, a El Nacional.

Morales no revela las cifras de esas transacciones, pero expresa que con el dinero recibido la institución recuperó la inversión y puede continuar con su proyecto de dar residencia, alimentación, educación, asistencia médica, vestuario y bonificaciones económicas a los chicos que llegan a sus instalaciones.

Por ahora otros elementos esperan la oportunidad de convertirse en exitosos jugadores y ven en Independiente la posibilidad de hacerlo. Es el caso del arquero Eddy Aragón, de 17 años, quien atraviesa la etapa de prueba. Dentro de un mes conocerá si se va o se queda.

El golero viajó desde Guayaquil junto a su madre, Paola Aragón. Antes realizó prácticas en Rocafuerte y en Norteamérica, pero consideró que en Sangolquí habría “mejores oportunidades”.

Gestión

El modelo de gestión de Independiente no solo se sustenta en reclutar a personas por sus condiciones físicas y técnicas, ya que cuenta mucho la buena actitud. Freddy Tello, vicepresidente del club, dice que el deportista recibe una atención integral, y que para exigirle mucho, hay que darle todo lo necesario.

La infraestructura del complejo de alto rendimiento cuenta con dormitorios para más de 100 personas, comedores, gimnasio, camerinos, duchas, salones de juego y aulas de clases.

Roberto Arroyo, coordinador de las categorías formativas, menciona que los jóvenes tienen un sistema de estudios diferente al regular, donde se priorizan las materias básicas. Reciben lecciones de matemáticas, historia, ciencias naturales, informática e inglés.

Los estudios se siguen bajo un convenio con el colegio 21 de Noviembre, que otorga títulos de bachillerato en Ciencias Generales. Las obligaciones de los jóvenes son ser buenos compañeros, buenos estudiantes y defender con pundonor la camiseta del Independiente.

La ayuda de la entidad a los futbolistas también incluye bonificaciones económicas mensuales. Los chicos de las divisiones sub 12 y sub 14 perciben 50 dólares. Los de la sub 16, 100 dólares. Y 150 los de la sub 18.

Las mejoras salariales dependen del rendimiento. Independiente, que maneja un presupuesto anual de entre 3000.000 de dólares y 3500.000 destina el 30% de ese total a los gastos que demanda el mantenimiento de los adolescentes.