En este mundo de abundancias, espero haber captado su atención con el título de esta columna ¿Escasez? ¿Escasez de qué? Atravesamos tiempos donde, por cualquier lugar que vayamos, escasea la empatía. Es difícil encontrar en las personas esa capacidad de ponernos en los zapatos del otro, de ser considerados con las situaciones por las que atraviesan las otras personas, de tomar en cuenta las emociones ajenas. Supuestamente, una de las características que justamente nos hacen humanos. Personalmente, me he encontrado con personas o experiencias donde los perros tienen más desarrollada esta capacidad que algunos seres humanos.
Pienso en todo esto mientras en el vecino país, Colombia, se revela información muy sensible sobre nuestros periodistas secuestrados tal vez sin pensar previamente en las consecuencias de hacerlo, sin pensar en la situación delicada para las víctimas, sus familias y la seguridad de un país entero (por cierto, no nos olvidamos: #NosFaltan3). Pero también pienso esto mientras escucho cómo una madre juzga, ataca y humilla a su hija adolescente por quedarse embarazada, mientras la muchacha llora desconsoladamente porque acaba de perder involuntariamente a su bebé. También mientras leo en redes sociales varias situaciones de “cyber bullying” contra alguien que, bien o mal, piensa diferente… y ha “cometido el error” de considerarse libre de publicarlo (Sí, los adultos también acosamos cibernéticamente, de hecho más que los menores, y sí, también tiene efectos devastadores). Todo esto me hace preguntar dónde tenemos escondida la empatía.
No nacemos empáticos y aunque la naturaleza nos manda ya con ciertas bases, la empatía es una habilidad que se desarrolla durante la vida, a través del ejemplo y la autoconciencia. Y se desvanece porque es difícil ponerla en práctica, y nuestra naturaleza es cómoda. Es difícil hacerse cargo de lo que el otro siente, es cierto, pero cuando nosotros estamos pasando alguna dificultad, lo único que quisiéramos es que el resto se ponga en nuestros zapatos. Entonces, dando, dando. (O)
