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El Telégrafo
Duglas Rangel Donoso

La maldad de Quinsaloma

30 de junio de 2020 - 00:00

La justicia es algo grande. Es una cosa grande. Ser justo es ser justo, ético, actuar con moral y sin odio. La justicia es el bien más apreciado en una sociedad. Actuar con justicia en nuestros actos e intenciones es no hacerle daño a nadie ni perjudicar ni deshonrar. Un acto de injusticia ofende a la sociedad y enferma a la comunidad.

Galo Lara fue acusado de un crimen atroz que ocurrió en la población de Quinsaloma, provincia de Los Ríos. El correísmo lo acusó y lo involucró judicialmente. Galo se desempeñaba como asambleísta y era el más duro oponente de la dictadura correísta.

Hoy la Fiscalía aceptó la sentencia de casación que ordenó la liberación de Gilber Llanos, el hermano de Carolina Llano, pareja de Galo Lara, quien fue acusada directamente como autora intelectual del crimen. A Gilber se lo acusó de haber pagado a los sicarios que cometieron el crimen de Quinsaloma. Ahora después de cuatro años preso la justicia por sentencia indica que “no hay pruebas que acusen que Gilber pago a los sicarios y ordenó su libertad inmediata”. Por tanto se acabó el caso Quinsaloma. Lo que significa que ni Galo Lara, ni los Llanos tuvieron nada que ver en ese crimen. Que todo fue una maldad del correísmo para eliminar a un opositor. Una patraña, un acto vil.

Qué grande que es la maldad. Qué grande que es la perversidad. Grande el odio y grande la infamia de involucrar a personas inocentes. Ahora la justicia hace justicia y trata de reparar el mal. Pero ocho años estuvo detenida Carolina Llanos, Galo Lara cuatro años, Gilber también cuatro años. Perversos, malditos todos los que acusaron a estos nobles ciudadanos que sufrieron una persecución implacable grande y cruel. Los muertos de Quinsaloma les caen encima a los causantes de la mentira que protegió a los verdaderos culpables y acusó a inocentes.

¡Malo Correa malo! ¿Quién reparará el dolor causado  por este teatro de malos que acusaron y encarcelaron a inocentes? La justicia le debe un perdón a Galo Lara. Estaremos atentos que así ocurra. ¡Qué fuerte y aguerrido Galo Lara! Los creadores de la infamia la pagarán con la misma justicia que manipularon. (O)

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