Philip Agee, ex agente de la CIA, dejó el anonimato en el año 1975. Sus denuncias conmocionaron a la opinión pública latinoamericana y mundial.
En su libro, en el que relata las actividades desarrolladas en el Ecuador, menciona varios “contactos” con los que se relacionó para el cumplimiento de los planes políticos que ejecutaba la embajada.
Como era de esperarse, en aquel tiempo los aludidos negaron rotundamente su participación en los hechos narrados con lujo de detalles por Agee. Por sus páginas desfilan muchos nombres.
Vamos a recordar – en sus propias palabras - su primer día: “Quito, Ecuador. 6 de Diciembre de 1960.- Al fin aquí. Nuestro ajetreado DC -7 se demoró más de lo previsto para llegar a Quito, incluyendo paradas en Panamá y Cali; pero Janet y yo veníamos en la sección de primera clase gracias a la política del gobierno de permitir gastos extras en vuelos largos. El ex presidente Galo Plaza, el líder del Partido Liberal, derrotado por Velasco, venía sentado tras nuestro y habría sido interesante hablarle pero temí que apareciera presuntuoso. (…) Fuimos recibidos por Blair Moffet, quien nos entregó la circular de la embajada para orientación. Casi todos eran puntos relativos a riesgos de salud. Luego nos dejó en un pequeño hotel de la zona residencial a menos de una cuadra de la Embajada misma”.
“(…) Después fuimos a una fiesta con los Noland en la casa de la familia que controla los cines. Todos ahí parecían estar emparentados por sangre o matrimonio y entre los invitados estaba Jorge Acosta, sobrino de Velasco y uno de los mejores amigos de La Estación en el gobierno. Él manda en la Junta Nacional de Planificación. Un trabajo de no mucho poder, pero siendo el favorito de entre los parientes del presidente Velasco, no está alejado de la toma de decisiones. Recientemente Acosta nos indicó que Weatherwax, nuestro oficial bajo la cobertura de Seguridad Pública, puede regresar ahora sin peligro”.
“La tensión en el escenario político ha aumentado en la última semana. El primero de diciembre el gobierno municipal de Quito bajo control del Partido Liberal, comenzó sus nuevas sesiones, produciéndose serios disturbios entre las turbas liberales y velasquistas. Cuando la policía de Araujo intervino, lanzaron su primera bomba lacrimógena al Alcalde Liberal (…)”.
¿Cuántos contactos criollos desarrollarán “operaciones” en el Ecuador en estos tiempos? ¿En qué instituciones públicas cumplirán sus “funciones”? ¿Cuántas organizaciones políticas y populares serán objeto de sus “informes”?
Hay gentes que eligen los altos montos de una chequera y dejan a un lado a la Patria. Sin embargo, su conciencia les dirá todos los días – en voz alta - lo que se merecen.
