Ecuador, 23 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
*Fernando Falconí Calles

Lolita Lebrón Sotomayor

21 de agosto de 2015 - 00:00

Nació en el pequeño pueblito de Lares el 19 de noviembre de 1919. Emigró -como muchos de sus compatriotas- hacia Estados Unidos, en 1941. En Nueva York trabajó como operaria en una fábrica de ropa. En esa ciudad inició sus actividades políticas como delegada del Partido Nacionalista de Puerto Rico. La condición de colonia que padecía su amada patria la impulsó a dirigir una de las más audaces operaciones dentro del territorio estadounidense. En efecto, junto con Rafael Cancel, Irving Flores y Andrés Figueroa, decidieron ofrendar su vida por la noble causa de la independencia puertorriqueña.

El 1 de marzo de 1954 atacaron al Congreso de Estados Unidos. La fecha fue escogida para rechazar lo sucedido el 1 de marzo de 1917, cuando los colonizadores -necesitados de tropas para la Primera Guerra Mundial- impusieron la ciudadanía estadounidense en la isla, para reclutar soldados y enviarlos al frente de batalla. Una vez que el grupo logra llegar hasta el piso superior, Dolores se incorpora y grita: “¡Viva Puerto Rico libre!”, exhibiendo al mismo tiempo la bandera de su patria. El grupo abre fuego contra varios congresistas hiriendo a varios de ellos. Alvin Bentley, representante del Estado de Michigan, fue el más afectado; una bala lo impactó en el pecho. Lolita y sus compañeros de lucha fueron detenidos; en el momento en que era arrestada dijo: “Yo no vine a matar a nadie, ¡vine a morir por Puerto Rico!”. Los cuatro patriotas fueron acusados de intento de asesinato y otros cargos; enjuiciados y sentenciados a la pena capital. El presidente Truman conmutó la sentencia a cadena perpetua. Lolita fue encarcelada y soportó un riguroso régimen durante muchos años. Sus compañeros fueron recluidos en otras prisiones federales.

En 1979, luego de permanecer 25 años en la cárcel, el presidente Jimmy Carter -bajo fuerte presión internacional- concedió el indulto a Lebrón y a dos de sus compañeros, puesto que Andrés Figueroa había fallecido en prisión. Al retornar a su patria fueron recibidos como héroes por un pueblo entusiasta y agradecido. La heroína puertorriqueña continuó activa en su lucha por la independencia y soberanía de su país, hasta el último día de su vida.

Su heroica acción fue fundamental para devolver el sentido ético a la lucha contra esa farsa llamada ‘Estado Libre Asociado de Puerto Rico’. El ‘estatus’ de colonia se legitimó en 1953 por la Asamblea General de la ONU debido a las fuertes presiones ejercidas por Estados Unidos. De esta forma se quiso anular para siempre el derecho del pueblo puertorriqueño a ejercer su autodeterminación.

“Juran los que te matan que eres feliz… ¿Será verdad?”, se preguntaba el poeta cubano Nicolás Guillén. Lolita y sus tres compañeros de encargaron de dar la más contundente respuesta.

Por Puerto Rico, Dolores sacrificó su juventud y soportó los mayores sacrificios bajo un sistema carcelario que con ella fue especialmente cruel.

El 1 de agosto de 2010 la heroína falleció a la edad de 90 años. Su gesta seguirá iluminando el camino de los valientes independentistas que no descansarán hasta ver a su patria liberada. (O)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media