Este 3 de julio de 2019 se cumplieron 10 años de la muerte del poeta ecuatoriano Jorgenrique Adoum. Nació en Ambato el 29 de junio de 1926. Estudió la secundaria en un colegio jesuita. Terminó sus estudios de Filosofía y Derecho en la Universidad de Chile.
Fue secretario y gran amigo de Pablo Neruda, allí conoció a grandes escritores como Rafael Alberti, Nicolás Guillén o Miguel Ángel Asturias. Visitó muchos países, vivió en Paris, en Beijing, Ginebra. Estas vivencias intensas lo convirtieron en un “ciudadano del mundo” comprometido con la izquierda marxista, con la poesía y con el arte.
Un humanista incansable, vivió para denunciar a través de su voz y su escritura, las injusticias del mundo y los abusos del poder. Su apuesta por la libertad y los sueños fueron el aliento vital de su camino cotidiano. Su prolífica obra da cuenta de su pasión por la literatura, su apuesta por la palabra fue su bandera infinita de voces, interrogantes y luchas.
Publicó ensayo, narrativa, poesía, teatro: “Aproccimasión a la paraliteratura”, “Ecuador: señas particulares” (ensayo) entre otras. “Los amores fugaces, memorias imaginarias”, “Entre Marx y una mujer desnuda” (narrativa) “Obras (in) Completas Jorge Enrique ADOUM Poesía” varios tomos. Hoy me tomo un café con “el turco” como lo llamaban, así le pido un pedazo de su poesía…
“El desvelo y las noticias”
En mitad de la noche despierto
Y me levanto como para vestirme,
Como para llorar o para ver si duermes
Lateral y desnuda.
Pero es cierto:
Ya no tengo tu voz saliendo
debajo de mi boca, ya no tropiezo
con tus tristes zapatos las mañanas,
ya solo yo, yo solamente y solitario
en los almuerzos y en el hambre,
visitante extranjero de costumbres
que se me había ido como una
edad, yo nuevamente familiar y ajeno…
…Cuando en la lluvia, cuando
en mi taza de café me quedo,
cuando en mi ropa, y el sueño
a ti sola te circunda,
y yo no sé nada de ti…
Su voz se enredó en el humo del cigarro y las palabras se escondieron en un sorbo de café, yo cerré las páginas de Ecuador amargo (1949). (O)
