El domingo pasado se llevó a cabo la décima novena y penúltima prueba válida por el Campeonato Mundial de Fórmula 1, el Gran Premio de Estados Unidos que luego de 5 años volvió a recibir a la F1, esta vez en el nuevo trazado diseñado y construido especialmente para ello, en la ciudad de Austin, capital del Estado de Texas. Lewis Hamilton apareció como “árbitro” del duelo que tiene enfrentados por el título mundial a Sebastian Vettel y Fernando Alonso, para ganar de manera magistral la competencia precisamente por delante de Vettel y Alonso, 2º y 3º, respectivamente.
Para empezar, habría que decir éxito total este Gran Premio de Estados Unidos. ¡Por fin le atinaron! En un país con su propia cultura automovilística con la categoría Nascar y la Fórmula Indy, la F1 nunca ha sido bien recibida por los norteamericanos, pero al organizar el Gran Premio en el Estado de Texas, es decir cerca de México justo cuando empiezan a aparecer luego de 40 años pilotos mexicanos que destacan, la presencia de aficionados “mariachis” superó las 40.000 personas a más de otros tantos miles de más países hispanoamericanos que se hicieron presentes para ayudar a abarrotar las tribunas de una pista -además- impecable y con un diseño muy bien pensado.
Y sin duda que los fanáticos no salieron decepcionados, puesto que la carrera que nos ofrecieron Hamilton y Vettel fue realmente sensacional con vueltas de clasificación de ambos de principio a fin, tras lo cual el piloto de McLaren debe haber logrado la mejor de sus 21 victorias en Fórmula 1.
Lewis arrancó desde la 2ª posición de la grilla, pero tras la señal de partida se vio superado por Mark Webber, al cual debió pasar para ir en busca de Vettel a quien pudo dar alcance, y tras una implacable persecución que duró decenas de vueltas logró finalmente pasarlo en el giro 42, es decir a 11 de la bandera a cuadros que Hamilton recibió primero, pero con Vettel “pisándole los talones”, es decir un nivel de conducción y de concentración que solo pilotos extraordinarios como estos dos pueden alcanzar.
Con los 25 puntos que se le otorga al ganador, Hamilton es 4º en el campeonato a 16 puntos de Kimi Raikkonen, el tercer mejor ubicado y que en Austin solo pudo terminar en 6ª posición. A su vez, con los 18 puntos de Vettel, Red Bull (que solo necesitaba 4) se consagró por tercer año consecutivo como campeón mundial de constructores de F1 mientras que Ferrari y McLaren definirán el subcampeonato la próxima semana en donde a su vez Vettel y Fernando Alonso finalmente resolverán quién es el campeón de pilotos 2012.
En Austin, Alonso finalizó 3º con lo cual solo perdió 3 puntos más frente a Vettel, pero el ritmo del Ferrari frente a los McLaren y Red Bull de Hamilton y el mismo Vettel fue desmoralizante. Fernando terminó a casi 40 segundos de la punta. Con esto es casi imposible pensar que en condiciones normales el piloto español podrá vencer al piloto de Red Bull en la última carrera del año en el circuito de Interlagos en la ciudad de Sao Paulo, este domingo que viene. La diferencia que separa a los dos pilotos es de 13 puntos, por lo tanto, para poder ser campeón por tercera vez, Alonso necesita ganar y que Vettel no finalice mejor que 5º.
Si termina 4º ambos pilotos igualarían en puntaje, pero el mayor número de victorias de Sebastian (5 contra 4 de Fernando) de todos modos le daría el título por tercera vez consecutiva al piloto alemán. Insisto, a simple vista, esto se ve muy poco probable. Actualmente el Red Bull de Vettel luce muy superior al Ferrari de Alonso, peeeero… en el deporte y sobre todo en las carreras de autos “el pan suele quemarse a las puertas del horno”.
De hecho, hace 2 años eso es exactamente lo que sucedió entre estos dos mismos pilotos, pero al revés, es decir, Alonso llegó a la última carrera del año con 15 puntos de ventaja sobre el propio Vettel; con solo terminar 5º Fernando se proclamaba campeón en su primer año conduciendo para Ferrari. No obstante, al final del Gran Premio Vettel ganó y Alonso fue solo 7º con lo cual, en contra de todos los pronósticos, Vettel se llevó el título a casa, por lo tanto, ¿quién dice que la situación no puede volver a repetirse, esta vez a favor de Alonso?
Hagan sus apuestas, que entrada la tarde del próximo domingo ya sabremos quién de los dos actuales bicampeones, Vettel o Alonso, marcará la diferencia con un tercer Campeonato Mundial de Fórmula 1 en su poder.
