Ecuador, 19 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Ximena Ortiz Crespo

El lenguaje inclusivo

22 de mayo de 2021 - 00:00

A mis amigos les da urticaria cada vez que constatan cómo las mujeres exigimos –cada vez más enérgicamente– que el idioma nos incluya. Sacan de inmediato el argumento de la Real Academia de la Lengua de que no debe cambiarse un ápice la forma en que hemos utilizado la lengua por siglos y su advertencia de que debemos abstenernos de cambiarla.

Mis amigos no toman en cuenta que prácticamente la totalidad de los miembros de la RAE está compuesta de varones y que con sus sermones revelan la forma estática en que conciben la realidad. Habrá que reflexionar con ellos cómo el mundo cambia día a día y cómo sus admoniciones sobre la economía y la armonía del lenguaje van contracorriente.

Una de las formas de discriminación que perpetúa las desigualdades entre hombres y mujeres es el sexismo en el lenguaje. Al ser la lengua un sistema de comunicación que refleja las concepciones y valores presentes en una sociedad, esta suele establecer una diferencia social entre los sexos que refleja y transmite los significados asignados por las palabras. La lengua que usamos trata de forma diferenciada a hombres y mujeres y, en múltiples ocasiones, refuerza y reproduce la desigualdad.

El Sistema de Naciones Unidas ha comprometido a los países a adoptar medidas para erradicar los usos excluyentes del lenguaje. El postulado básico que inspira este compromiso es nombrar a la mujer y resaltar su presencia en cada ocasión. La invisibilización histórica de la mujer y la inferiorización de esta con respecto al hombre son las razones detrás de esta resolución. Para eliminar el trato desigual sostiene que promover el respeto hacia la mujer y limitar la prevalencia de una mirada masculina es urgente porque, con demasiada frecuencia, el lenguaje pone al hombre como modelo, medida y representación de la humanidad.

Pero la ONU no es la única que se percata de estos fenómenos. La Sociedad Lingüística de los Estados Unidos demuestra con sus investigaciones que, al estar expuesta la población al uso del masculino genérico en textos y en discursos, una mayoría abrumadora los interpreta como refiriéndose exclusivamente al varón. Este es el caso de referencias tales como “el hombre primitivo solía cazar y recolectar”. La Escuela John F. Kennedy de Harvard tiene evidencias para respaldar esa interpretación. En un estudio hecho en una empresa que ofertaba un puesto directivo para sus miembros en el que se utilizaba el masculino genérico, se encontró que las empleadas respondieron con un menor sentido de pertenencia institucional, menor motivación y menor identificación con el trabajo, en comparación con otras mujeres expuestas a un texto similar en el que se usaba lenguaje inclusivo o neutral con relación al género.

El mundo da vueltas y las cosas cambian igual que cambian las formas de expresión, les guste o no a los académicos. Los jóvenes del Cono Sur dieron el ejemplo con su forma de hablar y han inventado una especie de “neutro”: el morfema -e, que está siendo usado por las nuevas generaciones. “Alumnes, todes, chiques son algunas de las palabras que los jóvenes argentinos y chilenos, punta de lanza de esta propuesta lingüística, usan para relacionarse entre ellos en busca de la igualdad” dice el diario El País en una edición de 2019.

En España, mientras tanto, hemos visto la iniciativa del gobierno de Sánchez de solicitar a la RAE que revise la Constitución con el foco puesto en la cuestión del masculino genérico. Y el partido aliado de los socialistas modificó su nombre y se autodenominó “Unidas Podemos”.

Beatriz Sarlo, experta en posmodernidad, periodista y profesora de la UBA y de grandes universidades estadounidenses, desmiente que los que usan el lenguaje inclusivo busquen cambiar la lengua y pongan el acento en la gramaticalización. Para ella, el objetivo real de usar y defender el lenguaje inclusivo es buscar la igualdad. Un objetivo social y político. Una configuración discursiva de la lucha de las mujeres y de los LGBTIQ+.

Mientras la RAE cavila y prohíbe, les actores sociales actúan y trazan nuevos caminos en el uso de la lengua, cosa que les hijes de mis amigues también lo harán...

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media