En diciembre del año pasado, personal del Ministerio del Ambiente (MAE) detectó que grupos de andinistas ingresaban a la cumbre del volcán Cotopaxi por la cara sur del coloso, sector Ticantilin.

Esto pese a la prohibición de esta actividad que rige desde el 15 de agosto de  2015, fecha de la más reciente reactivación del macizo. Frente a esto el Ministerio de Ambiente (MAE) organizó brigadas, junto con los guardaparques, para evitar los ascensos clandestinos.

Ticantilin es una comunidad de  la parroquia rural Mulaló, en el cantón Latacunga, y es la localidad habitada más cercana a la cumbre del volcán.  El 90% de sus habitantes se dedica a la agricultura y muchas veces ha atestiguado la llegada y ascenso de los andinistas.

Mario Rocha, presidente de la Junta Parroquial, explicó que recientemente mantuvo conversaciones con los habitantes del sector y acordaron solicitar a las autoridades se habiliten los chaquiñanes de acceso a la cumbre para impulsar el turismo comunitario.   

Los moradores consideran que este es un atractivo que puede ser aprovechado turísticamente. Si esta petición tiene respuesta favorable, se habilitarán en la localidad servicios de hospedaje, alimentación, venta de artesanías y recuerdos, y guianza por el lugar. “Aquí residen personas de la tercera edad que cuentan interesantes leyendas referentes al Cotopaxi y al encanto que lo envuelve, lo cual puede ser un atractivo para los visitantes”, comentó Rocha.

A más de esto el presidente de la Junta Parroquial explicó que el lugar ofrece avistamiento de aves, insectos, especies vegetales endémicas y espectaculares miradores.

Los dirigentes de la comunidad han solicitado la apertura de la ruta a las autoridades provinciales y se encuentran a la expectativa de la respuesta. El único requisito para la habilitación del trayecto es la autorización de la Secretaría de Gestión de Riesgos. A este pedido se suma Sebastián Toapanta, representante de la agencia de turismo Cotopaxi Travel, y andinistas de la región. (I)