“El trabajo purifica el cuerpo y alma del recluso. Cuando este se dedica a una labor manual ‘tras las rejas’, se sirve el pan con dignidad, se acuesta a descansar como Dios manda y se olvida de drogas, alcohol, otros vicios y de delinquir”. El autor de esta frase es Josep Mas Junqueras, fallecido capellán de Cataluña. En su paso por varias cárceles de Barcelona, Tarragona y Lleida; entre 1.985 y 2.010, a más de su función espiritual es recordado por su apoyo a programas de rehabilitación y reinserción social a través de labores manuales y otras actividades productivas.

Bajo esta premisa, varias cárceles del mundo optan por rehabilitar a las personas privados de la libertad (PPL) con la creación de micro empresas de elaboración de comestibles, artesanías, muebles, textiles, calzado y otras mercancías.

En Ecuador este modelo se aplica desde hace varios años como una de las mejores opciones para mantener ocupados a los presos durante su reclusión y brindarles conocimientos laborales que les sean útiles cuando se reincorporen a la sociedad.

Un ejemplo de ello es la iniciativa que se lleva a cabo en el Centro de Rehabilitación Social Regional (CRS) de Cotopaxi, la cual plantea enseñar a los PPL a elaborar queso de manera artesanal. Días atrás funcionarios del Centro visitaron la comunidad El Lindero, de la parroquia Pilahuín, al sur de Ambato, para conocer de cerca los procesos que recibe la leche antes de convertirse en requesón, suero y queso fresco.

Pilahuín es conocida a nivel regional por su excelente producción láctea, a la par de su cultivo de ajo. Su clima intensamente frío, debido a los 3.200 metros de altura, facilita la crianza, alimentación y reproducción de ganado vacuno de la raza Holstein. El objetivo de las autoridades del CRS es implementar al interior del Centro un taller donde se elabore quesos de excelente calidad y se cree una línea de comercialización.

La asociación de elaboración de quesos La Avelina, de la parroquia Pilahuín, cuenta con todos los implementos necesarios para hacer quesos. Estos insumos, según el CRC, serán adquiridos para este Centro penitenciario, por medio de convenios interinstitucionales con el Ministerio de Industrias y Productividad.

Trabajo mancomunado

Edwin Castelo, director del CRS Cotopaxi, como parte del Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, se comprometió a entregar a La Avelina puertas, ventanas, bases para los calderos y pupitres elaborados por los PPL; a fin de facilitar el trabajo de la micro empresa.

En agradecimiento el personal de la asociación capacitará a los internos que se integren a la actividad, sobre elaboración de productos lácteos con normas de higiene, manipulación de alimentos y seguridad.

Se estima que el proyecto arranque en un plazo de cinco meses. El taller de productos lácteos estará en la sección de máxima seguridad del CRS Cotopaxi, con la participarán de 30 privados de la libertad de la tercera edad que hayan mantenido una buena conducta.

Este grupo trabajará en turnos rotativos con 15 reclusos, en horarios matutino y vespertino, de acuerdo al número de pedidos que se tenga. (I)