Hoy se celebran 21 años de creación del Parque Nacional Llanganates, una zona que cuenta con 200 mil hectáreas de área protegida con las provincias de Cotopaxi, Napo, Pastaza y Tungurahua.

El 19 de marzo de 1996 fue la fecha en que pasó a ser parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas por la conservación de la biodiversidad y mantenimiento de sus funciones ecológicas.

En 2008 fue declarado sitio Ramsar como una fuente inagotable de recursos naturales que garantizan la conservación de la flora y fauna para la región.

Los sitios Ramsar se designan porque cumplen con los Criterios para la identificación de Humedales de Importancia Internacional. El primer criterio se refiere a los sitios que contienen tipos de humedales representativos, raros o únicos, y los otros 8 abarcan los sitios de importancia internacional para la conservación de la diversidad biológica. Estos criterios hacen énfasis en la importancia que la Convención concede al mantenimiento de la biodiversidad.

Los Llanganates mantienen la leyenda de que ahí fue donde Atahualpa escondió su tesoro, pero su riqueza se evidencia en la biodiversidad de su naturaleza desarrollada en un clima de páramo con una altitud de 860 a 4.571 metros.

En el parque se encuentran más de 800 especies de plantas, cerca de 300 especies de aves, más de 20 especies de reptiles y anfibios, más de 50 especies de mamíferos.

Jaime Palacios, biólogo de la organización WCS, señala que las comunidades que habitan en la zona colaboran con la gestión de conservar esta biodiversidad. Estas personas no queman el páramo y cuidan la salud del ecosistema que depende de la provisión de agua.

El pasado viernes 17 de marzo, funcionarios del Ministerio de Ambiente realizaron un homenaje liderado por el viceministro del Ambiente, Juan Carlos Soria. En el acto participaron 80 personas entre autoridades de los Gobiernos Autónomos Municipales y
Parriquiales de Cotopaxi, líderes de las comunidades Sacha, Cumbijin, más representantes de universidades, de los centros de manejo de vida silvestre y de las juntas de agua. (I)