Las retrospectivas de importantes artistas tomaron un protagonismo muy especial en un año en el que se ha realizado, además, un viaje por distintos momentos de la historia del arte, sobre todo de las vanguardias del siglo XX.

Paul Klee: Making Visible, es una de las más destacadas. Se exponen en el Tate Modern, de Londres. Más de 130 obras del renombrado pintor germano-suizo que reflejan la diversidad y complejidad del artista, recorren cronológicamente a lo largo de tres décadas la evolución de la versátil e intensa obra del pintor en óleos, acuarelas o tinta en 17 salas. La muestra estará abierta hasta el 9 de marzo de 2014.

El posimperionismo de Vincent Van Gogh también se hizo presente en 2013. La muestra Van Gogh en su taller se exhibió en el museo que lleva el nombre del pintor, en Amsterdan. Los secretos de la pintura del holandés se pusieron al descubierto en la exposición de 200 obras, que permitieron descubrir cómo el artista aprendió su oficio, qué técnicas de color y qué materiales usaba o cómo concebía sus cuadros, rompiendo mitos que se le atribuían.

Otra corriente pictórica en la que los museos exploraron este año fue el surrealismo. La sala de exposiciones Centro Pompidou, en París, mostró El surrealismo y el objeto. El museo parisino se acerca a este ísmo artístico con una mirada nueva que por primera vez se centra en las esculturas del movimiento más longevo de las vanguardias del siglo XX. La muestra, que podrá visitarse hasta el 3 de marzo de 2014, cuenta con más de 200 obras que van desde las primeras esculturas realizadas bajo el dadaísmo hasta las que Joan Miró creó a finales de los años sesenta.

Otra de las muestras significativas de este año fue Munch 150, expuesta en la Galería Nacional/Museo Munch, en Oslo. Se vieron más de 270 obras de Edvard Munch, y es la mayor retrospectiva dedicada al autor de El grito.

Con esta exposición se celebraron los 150 años de su nacimiento. La muestra hace un extenso recorrido por la obra del que está considerado uno de los pintores fundamentales del siglo pasado.

Finalmente, se destaca asimismo Lichtenstein: una retrospectiva, en el Tate Modern. Esta gran muestra sobre Roy Lichtenstein desvelaba a través de más de 125 trabajos nuevos matices en la obra del artista que se inspiró en el cómic y la cultura de masas para explorar el concepto de la percepción.