Por primera vez, la cuadra de la calle Córdova y Mendiburu, en el centro de Guayaquil, fue cerrada al tránsito con ocasión de la Feria Intercultural y Gastronómica Porteña.

La idea surgió hace dos meses, cuando Miriam Herrera y Freddy Girón, gestores culturales y dueños de la picantería La Culata, pensaron que era necesario crear un espacio tradicional para celebrar las fiestas por los 481 años de fundación de Guayaquil.

Desde las 10:00 hasta las 18:00 de este domingo atienden 20 estands con comida típica como bollos de pescado, tonga, empanadas de yuca, sánduches de chancho, arroz con menestra y carne asada, chuzos, alitas, entre otros.

La guayaquileña, Jackeline Cabezas, ofrece un plato diferente. Al típico bollo, elaborado con una masa de plátano verde y envuelto en una hoja de la misma planta, le coloca chorizo, pollo y huevo bajo el nombre de 'bollo arrecho'.

La especialidad la prepara desde hace 20 años, como parte de una tradición de su familia proveniente de la provincia de Esmeraldas.

En cambio, Pedro Bermúdez ofrece junto a su esposa, Rocío Morejón, el jugo de jackfruit, una fruta de unos 40 centímetros de color verde claro, propia de las zonas costeras.

El festival contó con presentaciones musicales, danzas de escuelas folclóricas, la elección de la criolla bonita, juegos como la olla encatada, ula-ula, trompo y cuarenta.

“De aquí ya no vamos a parar, haremos la celebración año a año y será el festival de la calle Córdova”, asegura Herrera. (I)