Los recolectores de basura tienen dificultades para llegar a los sectores que carecen de obras públicas y donde los habitantes sí cancelan una tasa para recibir el servicio.

Las cooperativas del noroeste de Guayaquil (El Fortín, Flor de Bastión, Paracaidistas, Colinas de la Florida, entre otras) son barrios donde la empresa Puerto Limpio tiene dificultades para ingresar, ya que algunas calles no están pavimentadas. El cobro de la tasa, establecida originalmente en 1994, se realiza a través de las planillas de la Empresa Eléctrica de Guayaquil (EEG). Según la ordenanza municipal vigente de aseo de calles, plazas y avenidas de la ciudad (creada en 2003) se cobra el 12,5% del consumo mensual por el uso de la luz, es decir, que si una persona factura $ 13 por el servicio de la EEG pagará $ 1,6 por el trabajo de Puerto Limpio.

Blanca Zambrano, habitante de El Fortín, paga hasta $ 0,80 por ese servicio, pero le toca caminar 200 metros para dejar las bolsas de basura en la calle más cercana (que está pavimentada).

Según la ciudadana, los vehículos recolectores no ingresan a la peatonal porque está llena de zanjas, “y en ese caso, es el Municipio el que debe preocuparse por arreglar la vía”.

La ordenanza que norma el manejo de desechos sólidos estipula que los usuarios deben “colocar los desperdicios en la acera, en el frente correspondiente a su inmueble, o en lugares apropiados y accesibles para la recolección por parte del personal de limpieza, en el horario y frecuencias fijados para el efecto”.

La tasa del 12,5% permite que en los sectores populares paguen menos por el servicio, explicó Gustavo Zúñiga, director cantonal de Aseo, Mercados y Servicios Especiales del Municipio.

Sin embargo, esto genera un déficit en el presupuesto asignado para la recolección de desechos. La EEG factura, por la tasa respectiva, un promedio de $ 3 millones mensuales cuando el Cabildo paga hasta $ 4,8 millones por el manejo y disposición de desechos sólidos. En consecuencia hay un déficit de $ 1,8 millones.

Zúñiga aseguró que es necesario cobrar la tasa a través de otros servicios para asegurar el flujo de ingresos hacia la Municipalidad. Hasta el momento las planillas de la EEG son el único medio por el que se recaudan los valores.

En cambio, en el pago de impuestos prediales se considera una contribución especial para hacer mejoras en la ciudad, alumbrado público y la emisión del recibo respectivo.

En las planillas de Interagua, que presta el servicio de alcantarillado y agua potable, no se considera a la recolección de basura como elemento de facturación.

El consorcio Puerto Limpio obtuvo, en 2009, el contrato de recolección de desechos en la ciudad, que tiene vigencia de 7 años y el valor supera los $ 174 millones.

Según cifras de la entidad, diariamente se recolectan 3.300 toneladas de desperdicios en la ciudad.

Los moradores de los barrios consultados admitieron que también hay problemas de contaminación en las calles, debido a que existen vecinos que sacan los desperdicios luego de que pasan los recolectores de basura del Cabildo, incluso incumplen las sugerencias de la concesionaria.