"Guayaquil me permitió progresar"

La carreta de Zianet está ubicada en la avenida Base Sur entre las ciudadelas El Cóndor y Álamos norte.

El lugar ofrece comida rápida. Su menú varía entre  papipollos, hamburguesas, pan de yuca y yogur.

Su especialidad es el “arroz con menestra maldito” que lleva tocino, queso, arroz, menestra, papas y pollo.

El propietario es Kleber Gómez, de 47 años. Nació en Manabí, y desde muy pequeño tenía el sueño de migrar a otra ciudad a trabajar y estudiar.  A los 23 años llegó a Guayaquil, con un bolso en el que llevaba sus pertenencias.

Su primer trabajo fue en una imprenta ubicada en el centro de la ciudad, donde permaneció 7 años. Atendía la caja y en ocasiones le daba mantenimiento a las máquinas.

“Al principio fue difícil acoplarse al estilo de vida en Guayaquil y al ritmo en el que se trabaja, incluso muchas veces tuve ganas de regresar a mi ciudad”.

Pero las ganas lo ayudaron a acoplarse al nuevo reto al que se enfrentaba. 

Durante los años que trabajó en la imprenta fue ahorrando para levantar un negocio. Siempre le llamó la atención el comercio de comida rápida. Se compró una carreta en $ 300, y con su esposa inició el negocio.

 Al principio fiaba en las tiendas para poder preparar la comida. El primer día vendió 5 hamburguesas y 2 salchipapas, luego incrementó las ventas y dejó atrás la necesidad de fiar. Ángel Moreira, de 18 años, trabaja para Gómez desde hace 6 meses.

“Aquí aprendí a ser muy amable con el cliente y a preparar varios platos”.

Benoit Guzmán es consumidor de sus papipollos y dice que ha probado comida rápida en diferentes negocios, pero que los de esa carreta tienen buena sazón.

Carlos Palomeque, otro cliente, asegura que acude a la carreta con su familia o amigos a pedir “la lonchera” que incluye papas y pollo. “Lo que más me agrada es la forma divertida con que atienden”. (I)