Ecuador, 20 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

El comercio le ganó a la distracción en El Centenario

 Los fotógrafos son una tradición desde hace más de 40 años. En el sitio también se ofertan masajes y lectura de cartas.
Los fotógrafos son una tradición desde hace más de 40 años. En el sitio también se ofertan masajes y lectura de cartas.
Foto: cortesía de John Sánchez Correa
25 de mayo de 2017 - 00:00 - John Sánchez Correa, estudiante de la ULVR

Transitar por el Parque Centenario ubicado entre las calles Pedro Moncayo, Víctor Manuel Rendón, Lorenzo de Garaycoa y José Vélez es ingresar a un pueblo pequeño dentro de Guayaquil. Así lo considera Miguel Rivera, de 84 años.

 Él ha visitado el  lugar desde hace 70 años y ha visto las constantes modificaciones del sitio.

Rivera recuerda que la primera vez que visitó el parque tenía 13 años y lo hizo con su padre, quien por aquella época era fotógrafo.

Fue uno de los primeros  que tuvo El Centenario, dice. Además cuenta que ese día su papá le regaló una cometa con el dinero que habían ganado por las fotografías.

“Eran otros tiempos. El lugar ha sufrido cambios con el paso de los años. La delincuencia le ha ganado la batalla a las personas de buena conducta, pero con la regeneración urbana que se inició en la alcaldía de León Febres Cordero se recuperó en algo el parque porque sigue siendo un lugar en donde se posan comerciantes y sobadores, gente que lo único que hace es darle más vida al sitio. “Las nuevas generaciones solo se fijan en la parte estética porque nunca sabrán lo lindo que era ver a los niños perseguir a las iguanas. Hacer volar una cometa aquí era maravilloso. Los adultos pasaban tardes amenas conversando sobre la familia y la ciudad”.

Quienes no pierden vigencia son los fotógrafos que con sus cámaras antiguas siguen manteniendo el viejo folclor del parque y aunque lo que ganan por día ($ 12 aproximadamente) no les alcanza para llevar una vida de lujos, no pierden la sonrisa. Abdón Leones Zambrano tiene 45 años ejerciendo el oficio. Le hace fotos a los guayaquileños y a los turistas. Aunque es considerado un sitio turístico, cada vez es más raro ver a familias que lo visitan. Mucho menos se aprecia a niños jugando. Quienes lo atraviesan desde la calle Lorenzo de Garaycoa y Pedro Moncayo o a la inversa caminan a paso acelerado porque siempre hay un mendigo pidiendo dinero. O el grito de los evangelistas que predican en busca de recuperar un alma.

En este lugar parece que habita todo un pueblo, asegura  Freddy Nájera, de 58 años, asiduo visitante del parque. “El parque era el favorito para reunirse con los amigos y conversar de todo.

Para Luis Rosero, un jubilado de 78 años, el Cabildo está haciendo los correctivos. 

“Trabajan en adoquinamiento, arreglo de fuentes, pintan las  bancas. Con ello se busca que las familias vuelvan al parque. Este lugar es emblemático para Guayaquil”. (I)  

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media