El ciclismo en Guayaquil se cultiva por colectivos que educan y marcan rutas
El ciclismo urbano en Guayaquil tomó impulso hace poco más de 5 años y se evidencia por las noches, cuando se ven a 10 o más personas andando por varias calles de la urbe.
Jimmy Martillo, líder del colectivo Ciclistas de la Calle, es parte de ese grupo que disfruta del pedaleo y lo fomenta con el fin de contrarrestar la contaminación ambiental.
Su agrupación se creó en 2012 y la convoca a través de redes sociales, donde publica recorridos y requisitos de seguridad como usar casco, luces, chalecos o ropa reflectiva. El punto de encuentro es la calle Tungurahua y Av. 9 de Octubre, a las 20:00, donde parten de 25 a más personas hacia distintas rutas, con duración de 2 horas; también hacen paradas cada 10 kilómetros para empatar y continuar.
Una de las aspiraciones de este comerciante de 58 años es introducir al pénsum pedagógico la materia de educación vial donde se respete al ciclista, pues en su experiencia asegura que la autoridad municipal ni la de tránsito han hecho un proyecto para esta comunidad. “Hay que educar y culturizar, por último evitamos las ciclovías, nos ahorramos el gasto y nos respetamos entre autos, peatones y ciclistas”.
Facebook Cyclist es un movimiento caracterizado por ser de acompañamiento. Su líder, Carlos Iván Calle, explica que este perfil se estableció desde que supieron que ciertas personas no querían salir solas por miedo. El grupo sugiere llevar un inflador y tubo de repuesto, además integran a un técnico que atiende en casos extremos.
Rutas urbanas
Ciclistas de la Calle parte desde la Av. 9 de Octubre, toma Los Ríos recto al sur hacia la Av. 25 de Julio y regresa por el redondel de la Domingo Comín; cruza el barrio Cuba hasta el Malecón 2000, gira por la Junín, va a la Rocafuerte, Loja, Julián Coronel y llega a la Av. Kennedy; se dirige hacia la V. E. Estrada hasta el puente de Miraflores y retorna. En cambio, la ruta de Facebook Cyclist inicia en el parque de la Kennedy, recorre la Víctor Emilio Estrada, atraviesa Miraflores, va hacia la Av. del Bombero, Los Ceibos hasta la Espol y retorna.
Ciclismo de ruta y montaña
Luiggi Santillán practica el ciclismo de montaña, algo que empata con su gusto por los paisajes y disfruta al subir cordilleras y cerros que acordonan la ciudad. Dice que el ciclopaseo no lo convenció y se decidió por recorrer los senderos. “Es todo un reto subir a la montaña, te da esa libertad de llegar a donde generalmente la gente no puede llegar. Es como una adicción, necesito aire, ver verde, sudar, cansarme, necesito la bicicleta, un hábito al que le dedico de 2 a 4 horas”.
Este empresario de 40 años es miembro principal de Monobikers y utiliza rutas como la 507 vía a la Costa, por la cordillera Chongón Colonche, también el sistema montañoso que cruza Bucay, Cumandá, Chillanes, o desde El Triunfo por El Piedrero un carretero que lleva hacia Huígra. Además, reconoce que junto a otros ciclistas trazan los trillos, unos caminos pequeños a los que les bajan la maleza con guadaña, machete y azadón.
La misma afición la comparte Carlos Álvarez, especialista en marketing, quien empezó a entrenar ciclismo junto al grupo T3 Sports, y compite en triatlones de forma personal y no en competencia. “Para los amateurs creo que el deporte más que un hobbie es una forma de competir contigo mismo, que no es que vamos a clasificar a las olimpiadas, solo quieres mejorar tus tiempos, quieres ser más rápido que tu versión anterior”.
Los recorridos los hace vía a la Costa hasta el peaje, o hacia Salinas; suele tomar la vía a Samborondón o por el desvío a Yaguachi, Milagro, Virgen de Fátima entre otras vías. (I)
