El movimiento comercial en Ipiales disminuyó y eso es evidente cuando se visitan los locales y almacenes. Por las calles se puede transitar sin congestión vehicular y después de las 13:00 la mayoría de los locales cierran por la hora del almuerzo.

Los ecuatorianos que aún llegan hasta esta ciudad ya no hacen extensas filas para pagar las compras. Pueden movilizarse con mayor facilidad entre los pasillos para obtener las ofertas que buscan, aunque estas también son menos.

“Pese a la distancia que me toca recorrer desde Quito vale la pena aún venir acá porque la diferencia de precios es grande. Yo vengo por ropa interior de mujer que está a mitad de precio comparada con lo que se expende en Ecuador”, comentó la quiteña Paulina Toledo de 35 años, quien aprovechó sus vacaciones para realizar el viaje.

El brasiere de una reconocida marca colombiana lo encuentra en $ 25; mientras en territorio ecuatoriano la misma prenda bordea los $ 55. “Ahora se encuentra estas prendas con más facilidad porque antes -con la demanda de ecuatorianos- lo mejor desaparecía rápidamente. Hoy ya no pasa eso porque hay menos compradores”, reiteró Toledo.

Ella además adquirió pañales. Un paquete de 50 unidades para niño recién nacido al cambio del peso colombiano (2.980 pesos) le representa $ 7, mientras el mismo paquete de pañales desechables lo consigue al doble en la capital, según dice.

“Esos son productos como los comestibles que no tienen restricción y pasan sin problema en la frontera”, indicó Carlos Quintana, residente de Tulcán, quien también compró víveres.

Harold Delgado, presidente de la Cámara de Comercio de Ipiales, reconoce que existe una disminución del 40% en la llegada de ecuatorianos a esta ciudad fronteriza en este primer trimestre de 2017.

Delgado puntualizó que el año pasado diariamente se movían alrededor de $ 400.000 en comercio. Ahora se llega a $ 240.000 o menos. Los ecuatorianos constituyen el 80% de compradores en esa ciudad colombiana; el resto son los propios residentes de los 13 municipios aledaños.

El funcionario aclara que esto no es por el aumento del IVA del 16% al 19%. “Estos 3 puntos no representan casi nada en el valor de los productos, lo que realmente ocurre es que hay otros aspectos que inciden como la canasta fronteriza o la prohibición de que el transporte público ecuatoriano, que hacía tours desde Quito hacia Ipiales o Pasto, cruce la frontera.

“Es evidente que en Ecuador la gente está más pendiente del asunto electoral y la definición del nuevo gobierno. Los ahorros que tienen los están guardando. Además, la demanda nunca va a ser la misma porque no son personas que constantemente tengan dinero disponible para estos artículos. La bonanza de hace 2 años ya disminuyó”.

Noelia, expendedora de un almacén de zapatos deportivos, reconoce que la bonanza con la llegada de los dólares ecuatorianos ya no es la misma. “Sí hay productos que se afectaron con el IVA como los celulares y por eso la gente no los compra”.

Ella es parte de los 11.000 comerciantes que tiene registrados la Cámara de Comercio.

Un celular Samsung J7 que en Ecuador se lo consigue entre $ 250 y $ 270 en Ipiales se lo comercializa en $ 235 y a ese valor hay que sumarle el 5% de impuesto a la salida de capitales por lo que el precio prácticamente es igual.

La baja presencia de compatriotas también la confirman los espacios que tienen los hoteles. En 5 consultados existía disponibilidad para todo tipo de habitaciones desde sencilla hasta familiar.

“Son menos los ecuatorianos que llegan, pero los fines de semana y cada quince mejoran en algo aunque no de la misma manera de antes donde nos faltaba espacio”, comentó Rogelio, empleado del hotel Reina Isabel, similar comentario expresaron en el hotel El Nogal del centro de Ipiales.

Los televisores todavía son los productos más cotizados

A los visitantes ecuatorianos en Ipiales les llama por completo la atención el valor de los televisores. Una TV Samsung de 55 pulgadas curved se la vende en $ 990; pero no se la puede traer legalmente porque está prohibida por las disposiciones aduaneras. El mismo televisor en Ecuador sobrepasa los $ 2.000.

Sin embargo los comerciantes que expenden la canasta comercial y no utilizan su cupo ofertan sus servicios para pagar los tributos como si ellos la compraran y legalizar la mercadería. Para ello el interesado debe pagar el 40% más del valor del producto y extender una compensación al facilitador.

“Todo depende del precio y los electrodomésticos que se quieran traer para establecer el monto que me debe pagar, eso sí es todo legal”, afirma Jacinto (nombre protegido) un taxista de Tulcán que oferta este servicio porque dice tiene un cupo de $ 17.000. (I)

DATOS

Según la Cámara de Comercio de Ipiales, en 2016 las compras de ecuatorianos representaban $ 400.000 diarios. En lo que va de este año se genera la mitad.

Un celular Samsung J7 actualmente tiene un costo similar tanto en Ecuador como en Colombia. El incremento se dio porque se debe realizar el pago del impuesto a la salida de divisas que equivale a 5%.

Una prenda de vestir femenina en Colombia tiene un valor de $ 25 mientras que la misma indumentaria en los centros comerciales ecuatorianos cuesta alrededor de $55.

Un paquete de 50 pañales cuesta $ 7 en las tiendas colombianas, mientras que en Ecuador el precio asciende al doble. En estos productos como toallas sanitarias y bicicletas de menos de $ 510 el IVA se mantuvo en 5%, en las últimas reformas.