Cerca de 94.000 personas salieron de la desocupación en un año

La recuperación que experimenta la economía ecuatoriana se evidencia en la disminución del desempleo. El primer trimestre del año la tasa se ubicó en 4,4% frente a 5,7% registrado en marzo de 2016. Es decir que se produjo una reducción interanual de 1,3%.

Las cifras corresponden a la última Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu), elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

El informe fue presentado ayer por el director del INEC, David Vera, junto a Leonardo Berrezueta y Diego Martínez, ministros de Trabajo y Política Económica, en su orden.

Berrezueta calificó la situación del desempleo como “una reducción histórica” en los últimos cinco años, dado que alrededor de 94.000 personas salieron de la desocupación.

Asimismo -indicó- se crearon 316.297 nuevos puestos de trabajo. Los tres sectores que generaron mayores fuentes de empleo son construcción con más de 58.000 plazas, en comercio se registran más de 61.000 y en agricultura la cifra es superior a 170.000.

El incremento en estas áreas correspondería tanto a personas con empleo pleno como aquellas que trabajan en la informalidad o realizan su propio emprendimiento.

En tanto, sectores como administración pública, defensa, turismo y servicios financieros recortaron cerca de 56.000 puestos.
Según Berrezueta, la tasa de desempleo se mantendrá este año, “incluso con tendencia a disminuir levemente”.

Con el porcentaje actual Ecuador se mantiene entre los países con menos desocupación en la región, superado solo por Bolivia, cuyo nivel es 4,1%. La tasa más alta la tiene Brasil, con 12,6%.

Para el académico Marcelo Varela, del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), los indicadores demuestran que el sector privado es el que genera empleo, lo cual, a su vez, es un reflejo de que las políticas adoptadas en materia económica y laboral “están surtiendo efecto”.

Coincidió en que los niveles de generación de trabajo seguirán siendo positivos en lo que resta del año.

Diego Martínez atribuyó la disminución del desempleo a tres variables de coyuntura que han mantenido un ritmo de crecimiento positivo desde finales de 2016.

Los créditos de la banca privada aumentaron el 12% entre marzo de 2016 y el mismo mes de 2017. También en ese período los depósitos se elevaron el 13%. Y, por último, la recaudación tributaria -sin considerar las contribuciones solidarias- se incrementó el 7%.

A ello se suma el saldo positivo de $ 422 millones de la balanza comercial reportado en enero y febrero de este año.
“Se logró aquel objetivo de evitar que los fuertes choques externos que vivió el país ocasionen incrementos fuertes en desempleo, desigualdad y pobreza”, acotó Martínez.

El subempleo creció por la disponibilidad de trabajar

La encuesta también revela que la tasa de subempleo pasó de 17,1% en marzo de 2016 a 21,4% en marzo de 2017. Son subempleadas aquellas personas con empleo que percibieron ingresos inferiores al salario mínimo y/o trabajan menos de la jornada legal y tienen el deseo y disponibilidad de trabajar horas adicionales, define el INEC.

David Vera explicó que la situación crece influenciada por la reducción de la tasa de otro empleo no pleno (deseo y disponibilidad de trabajar), ante una expectativa positiva de la economía. Provoca que más personas decidan incorporarse al mercado laboral.

“Lo que vemos ahora es una reducción del desempleo, estabilidad del empleo adecuado/pleno y una migración del otro empleo no pleno hacia el subempleo”.

Conforme se desarrolle el panorama económico del país se espera que en los próximos reportes el empleo adecuado también aumente.

En un documento difundido por redes sociales, la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes) sostiene que el aumento del subempleo y el empleo no remunerado refleja ineficiencia de la política económica para generar puestos de calidad.

Varela aclaró que el subempleo “no necesariamente es malo”. Hay que considerar que quienes abandonaron sus trabajos también iniciaron un negocio o actividad independiente. (I)