Fernando Villavicencio, exsindicalista petrolero, activista político y comunicador, retornó al país seis meses después de permanecer en Perú. Apareció ayer en el Colegio de Abogados de Pichincha para denunciar presuntos actos de irregulares en torno a la venta anticipada de petróleo a China y Tailandia, ocurrida durante el anterior Gobierno.   

Según Villavicencio, el crudo ecuatoriano no llegó a las refinerías chinas, sino que fue vendido por compañías intermediarias a otros países como Perú.

Asegura que en las operaciones de intermediación, en las que habría participado la empresa petrolera estatal Petrochina, Ecuador perdió alrededor de $ 2.200 millones.

Presentó documentación con la que afirmó que los precios del petróleo que pagó Petroperú por el crudo ecuatoriano tenían un diferencial de $ 3 y hasta $ 7 por barril.

Apoyado por Ramiro García, presidente del Colegio de Abogados de Pichincha, Villavicencio formuló ayer una demanda por peculado en contra del expresidente Rafael Correa, el vicepresidente Jorge Glas, otros funcionarios de la anterior administración y un empresario del sector privado.  

La denuncia contiene 105 páginas con 136 anexos de respaldo.

A criterio de García se trata del caso de corrupción más grande de la historia del país, que fue propiciado por el Decreto Ejecutivo 466, suscrito por Correa, en el que se comprometía crudo ecuatoriano como pago para créditos adquiridos con China.

Villavicencio abandonó el país  por una orden de prisión preventiva en su contra, acusado de atentar contra la intimidad de funcionarios del gobierno de Correa. Dijo que regresó al país como respuesta al pedido del presidente Lenín Moreno para que los ciudadanos denuncien delitos o casos de corrupción.

Añadió que está dispuesto a ir a juicio para demostrar sus acusaciones.

El pasado 21 de agosto el vicepresidente Jorge Glas, en una reunión con Alianza PAIS, dijo sobre el tema que “lo que Petrochina hace con el petróleo no es un tema nuestro”. (I)