Las nuevas modalidades contractuales que propone el Ministerio de Trabajo buscan incrementar las plazas y regularizar el trabajo informal.

En una entrevista con este Diario, el ministro Raúl Ledesma explicó que estos contratos se dirigen especialmente a los cuatro millones de personas subempleadas que ahora laboran sin ningún beneficio de ley. 

Las nuevas modalidades deberán cumplir tres condiciones: que no exista migración de contratos; deben aplicarse a actividades extraordinarias; y tener un impacto productivo.

Para la remuneración se contempla un incremento de entre el 15% y el 25% al valor de la jornada calculada según el salario básico ($ 375). En dicho porcentaje se incluyen los beneficios de ley (o proporcionales) como decimotercero, decimocuarto, vacaciones, compensación por fin de semana y desahucio. Otro rubro dependerá de cada actividad productiva.

El Ministro indicó que con los sectores florícola y hotelero se acordó un incremento del 25% y para el bananero del 15%. Aseguró que no habrá reducciones salariales y que se garantizará la afiliación a la seguridad social.

Los sectores en los que se aplicarían estas nuevas modalidades son agrícola, ganadero, bananero, arrocero, florícola, hotelero, de transporte, y de minería.

José Villavicencio, del Frente Unitario de Trabajadores, aprueba que las modalidades no se extiendan a otros sectores porque significará el regreso a una precarización laboral. “Hay que verificar que los derechos de los empleados se garanticen”.

Mientras que el abogado de derecho laboral, Joaquín Viteri, dice que cualquier regulación debe mejorar las condiciones vigentes en el Código de Trabajo.

Las propuestas se analizan junto con el Consejo Nacional de Trabajo y Salarios. El Ministro Ledesma espera que con las nuevas modalidades se regularicen más de 100.000 empleos en un mes y se creen más de 50.000 nuevas plazas. (I)