Texturas, feminismo y naturaleza en 3 autores
La artista colombiana Klaudia Muñoz, residente en Guayaquil; el chileno Manuel Tricallotis y la ecuatoriana Loly Barrionuevo presentaron la semana pasada, en la Galería Mirador de la Universidad Católica de Guayaquil, la muestra Texturas, feminismo y naturaleza.
Muñoz presentó en esta muestra una serie de cuadros en los que se propone resaltar cómo el rol de mujeres actuales está influenciado inconscientemente por los ancestros. “Por la conexión con nuestra historia familiar como efecto de nuestro comportamiento actual de mujeres. Roles, creencias, cultura caen en nuestro inconsciente y se enfrentan a nuestra propia idealización del papel de la mujer que queremos ser”, dice Muñoz en un correo enviado a este diario.
La pintora colombiana trabaja a partir del “estereotipo de la mujer que acompaña permanentemente a una sociedad y que nos persuade sin darnos cuenta y nos convierte en ‘esposas imperfectas’. Presencia espontánea de nuestros ancestros que aparecen en nuestra mente convergiendo entre los diferentes roles y reencontrándonos con comportamientos sumisos y rebeldes”. En 2014, Muñoz fue parte de Alteraciones heterogéneas, exposición colectiva de un grupo de estudiantes de Arte de la Universidad Espíritu Santo, en el MAAC.
En la muestra participaron Luciana Dueñas, Alejandra Salcedo, Jorge Weisson, Amine Saade, Rommel Romero, Sergio Mendoza, Sofía Zambrano y Rafael del Río.
Esta vez, Muñoz se diferencia del trabajo de Tricallotis y Barrionuevo por el uso de vajillas, pensadas como una intervención que dialoga con los cuadros que presenta.
El chileno Manuel Tricallotis usa los colores antípodas porque cree en aquello que decía Claude Monet: “La pintura debe ser una fiesta para los ojos”. (I)
