Una reportera de este diario visitó esta tarde al cantante inglés Steve Grimmett en el hospital Luis Vernaza de la Junta de Beneficencia de Guayaquil. El artista ingresó al centro de salud el domingo pasado; un día antes había ofrecido un concierto con su grupo, Steve Grimmett's Grim Reaper, en el puerto principal.

La noche del viernes 13 de enero, el show se dio en Quito ante un centenar de rockeros. Grim Reaper fue una agrupación de la llamada Nueva ola del heavy metal británico (NWOBHM, por sus siglas en inglés), que se gestó en la década de los ochenta. Después de 38 años de haber formado la banda, Grimmett visitó Ecuador por vez primera, junto con músicos que no pertenecían a la formación original y con quienes compuso el disco Walking in the Shadows (2016).

Para presentar este redondo —estéticamente parecido a la música que los hizo célebres hace más de 3 décadas— en América Latina, Grimmett y 3 acompañantes (Ian Nash, Paul White y Chaz Grimaldi) montaron el 'Walking in the shadows tour' que se inició el pasado 6 de enero en la ciudad mexicana de Monterrey. A día seguido actuaron en San Luis Potosí, para arribar a la ciudad de México el día 8.

Steve, quien padece una diabetes controlada hace 15 años, le contó a EL TELÉGRAFO que fue en esta parte de la gira —antes de actuar en Colombia y Ecuador— que tuvo una herida en el pie que se infectó con la humedad. Al llegar a Quito, un médico le advirtió que debía someterse a una intervención quirúrgica, pero continuó con su trayecto hasta que las dolencias fueron mayores. La pantorrilla derecha le fue amputada en el hospital porteño, donde tendrá que estar internado 2 días más. El reposo médico, de vuelta al Reino Unido, deberá ser de 6 meses, por lo cual canceló el resto de la gira, que incluía Perú, Chile, Argentina, Bolivia y Brasil.

“Los conciertos fueron geniales, como lo son cada vez que tocamos en Sudamérica”, dijo el vocalista —quien ha participado en otras bandas de renombre, como Onslaught—. “Siempre estuve bajo tratamiento, pero esta vez (la enfermedad) se fue de mis manos”.

Su debut en la capital duró poco más de una hora, con problemas en la amplificación. El set-list fue acortado debido a dolencias que se revelaban en los gestos del cantante, que subió a un escenario montado en uno de los auditorios del Centro de Convenciones Eugenio Espejo. En Guayaquil, la presentación fue en la Asociación de Trabajadores de la Cervecería Nacional, donde apareció sentado buena parte del concierto.

En una camilla, con el sueño que provocan los sedantes y el cambio de huso horario —al cual todavía no se acopla—, Steve Grimmett se mostró sorprendido de las visitas que ha recibido de sus fans ecuatorianos, quienes le han enseñado palabras en español y hasta le traducen indicaciones de sus doctores.

La esposa del artista, Millie Grimmett, aún no llega al país, pero ha publicado en la red social Facebook información sobre el estado del cantante, quien retornará con ella a Londres. (I)