Publicidad

Ecuador, 28 de Marzo de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Fander Falconí

FMI rompe con el neoliberalismo

22 de junio de 2016 - 00:00

Más papistas que el Papa, solíamos decir de los extremistas en cualquier tema. Hoy ha vuelto a estar de moda el término. No solo por la posición avanzada del Papa actual (por ejemplo, acaba de rechazar una donación del presidente Macri), que ha derrumbado el argumento católico conservador de la derecha latinoamericana. Ahora el santuario del capitalismo mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI), acaba de darle el tiro de gracia al argumento neoliberal de esa misma derecha latinoamericana.

El actual discurso del FMI es un martillazo contra la doctrina neoliberal que ha guiado la economía capitalista desde los años 80. John McDonnell, uno de los más respetados funcionarios del mencionado organismo internacional, saca a la luz la opinión actualizada de muchos economistas que trabajan en el Fondo. Dicen que la “creciente desigualdad” es dañina para el crecimiento económico. Parecerían palabras de la izquierda latinoamericana, ¿no?

Aunque los economistas del FMI no dejan de admirar a sus ídolos Pinochet, Ronald Reagan y Margaret Thatcher, reconocen sus errores. La agenda neoliberal tiende a incrementar la desigualdad y eso lesiona la sostenibilidad del crecimiento, aseguran. Recomiendan prestar mucha atención a la distribución de los ingresos (¿seguro que es el FMI?) y critican casos más recientes.

Por ejemplo, en el Reino Unido, el ministro de Economía George Osborne anunció planes de austeridad al asumir el ministerio (2010) y con el dinero ahorrado se dedicó a pagar la deuda externa adquirida por los británicos tras la crisis mundial de 2008. Osborne sostenía que eso daría al Reino Unido flexibilidad para prevenir futuras crisis. El FMI ahora considera que eso solo hubiera funcionado si los beneficios superaban los costos. Resulta que no fue así, porque para pagar rápidamente la deuda externa hubo que recortar gastos, incluyendo los productivos. La austeridad ahuyenta la inversión. A veces hace crecer un poco la economía, pero a costa de mayor desempleo. La austeridad trae más desigualdad y su consecuencia es la inestabilidad. El resultado final es menos crecimiento.

La austeridad del ministro Osborne ha fracasado y esa es la medida favorita del neoliberalismo. Hace juego con su idea del Estado débil y las corporaciones fuertes.

Tres economistas investigadores del FMI (Jonathan Ostry, Prakash Loungani y Davide Furceri) sostienen que el neoliberalismo ha sido exagerado por los seguidores de la doctrina capitalista. Los riesgos que implica la salida de capitales, por ejemplo, se han subestimado. Al reducir los gastos en bienestar social y permitir que aumente el desempleo, se ha hecho un daño al país. Ahora piensan que con una deuda externa alta no solo se puede sobrevivir, sino hasta crecer.

Ahora bien, no es que el FMI se haya convertido al socialismo, ¡aleluya! Aunque sus teorías hayan fallado, va a buscar otros justificativos para continuar su misión. En poco tiempo volveremos a oír del FMI, especialmente en Argentina.

En efecto, la experiencia del presidente argentino Mauricio Macri es un ejemplo evidente. Austeridad que causa desigualdad que causa inestabilidad. Eso no va a durar. Después de años de reparar el gran país del Sur, en medio año lo desmantelan. Asistimos a la agonía del neoliberalismo. Q.E.P.D. (O)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media