Ecuador, 20 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Versos

Nudo borromeo

Nudo borromeo
28 de noviembre de 2016 - 00:00 - Poema de Rodolfo Hinostroza

Lacan usó el nudo borromeo —el cual está constituido por tres aros enlazados entre sí, y si se saca uno de ellos, se liberan los otros dos— para explicar la estructura que forman los tres registros del ser hablante: el registro de Lo Real, el de Lo Imaginario y el de Lo Simbólico.

El poema homónimo del peruano Rodolfo Hinostroza abarca estos tres estadios del ser humano y representa un viaje hacia las palabras, hacia la noche y hacia la luz.

Este poema fue recogido en Nudo Borromeo y otros poemas perdidos y encontrados (Lustra Editores), y constituye el cuarto volumen de la obra poética de uno de los escritores latinoamericanos más importantes de todos los tiempos.

Un hombre vaga durante numerosos años fuera de su patria, estrechamente vigilado por Poseidón, y solo.

                                                                                                        Aristóteles

Y ahora remontas rue Vavin subiendo a Montparnasse

                Hay un río que duerme otro que murmura

Aquí Clayton hablaba de Loutine

                Los dorados temblores de Diana en el patio interior

El cuerpo multiplicado en millares de copias

                Y un presagio de tormenta en la escalera

Menos grave que en los años siguientes

          Y ahora todo resbala hacia Lo Real

Había sido algo menos que una presencia

          Definida con tenacidad

Al alba con las últimas luces de la fiesta

          La materia de los dioses extraviada en un recuento precipitado

De tantos viajes tantos libros tantas mujeres

          La sombra helada de un libro que te acecha

Mientras haces el amor en el bisel del espejo

          Las claves sumergidas en un catálogo de signos

Te requiere por una vibración de encajes y deseos

          Como el vaho sobre el cristal del automóvil

Londres un taxi palpitante a la puerta

          Una confidencia cubierta por el timbre del teléfono

Forma insuficientemente percibida

          A través de las celosías de la casa

Lo gris duerme su rapacidad vela

          Modo infinito en infinita parodia

Y ahora tratas de recordar un acto significativo

          Que te hubiera matado

Para que hacia él converjan las líneas del poema

          O el pavor de un sueño

Donde olvidas tus huellas en las cosas

          Como si al crepúsculo tornaras la cabeza

Viendo unas rayas difusas en la perspectiva

          Así cuando declina el viento de la noche

Hay tal vez una playa con casetas de vidrio

          Y estudias el mecanismo de las olas

Sobre la barrera que planta tu memoria

          Un dólar de plata por saberlo

El sentido de la experiencia debe encontrarse allí

          Y yo debo entonces perseverar en el poema

El Otro que yo he sido el Otro que estoy siendo

          Me debe ser designado en el poema

En una de sus líneas (tal vez en ésta misma)

          El insolente sol trepa al solsticio

Y se me hace saber que mi sombra se gasta

          Y una imagen recurre (la de Marianne)

Como si el erotismo fuera capaz de definirme

          Como si buscase definición

Deslizándome hacia el centro del poema

          Donde hay silencio y quietas placas de hielo

Calles que no llevan nombre

          Miedo de tocarlo y no tocarlo y atravesarlo sin tocarlo

Como una sombra de palabras

          Y hay líneas que se curvan sobre el horizonte

Otras sobre el crepúsculo

          Y acodado en las estepas mayores

Buscas la conjunción de los sentidos

          En una sola epifanía

La memoria como un espejo parabólico

          Descoyuntado por infinitos puntos de fuga

Que recompone ahora una imagen de mujer

          De actos presenciados en Mallorca

O en un pueblo belga que se llama Malone

          Cuyo sentido (si alguno existe) resistiría a la enumeración

De imágenes dispersas

          De una noche en busca de rue Giordano Bruno

Al fondo del distrito XIV y bajo la nieve

          O la de un lépero cagando sobre un puente en Comayagüela

O de una noche caliente y desolada en Managua

          Un Luna-Park en trozos

O caminando contra el viento a la entrada de Cerbère

          Buscando un maldito camión

Y todavía

          Atravesando un campo de lavanda en el Luberón

Con un vuelo de cuervos en el cielo cubierto

          Fascinado por la estupidez

(Lo Real)

          Y el amor que no sobrevive a Lo Real

Y poesía calla

          Puedes trepar a un bus hacer le tour du monde

Hasta que tus desgracias se consuman

          Y te llenes los ojos de países

Inexplicables como las mujeres

          Sombras frutas remolinos

Conversaciones a orillas de un catre

          Viajando hacia Entropía con un bolso de lona

Borracho (y agresivo) cada día

          Dónde quedó el lugar de la emoción largamente buscado

La voz (¿era una voz?) en los farallones de La Herradura

          Sucio cobalto mar

Los versos aullados al viento

          O la vigilia sobresaltada en un hotel de Ibiza

Y todo suspendido a esa enorme extrañeza

          De estar aquí haciendo precisamente eso

Quizá en suma

          La larga perplejidad

Que incita al mundo a ser lo que es

          Nunca lejos ni cerca

Nunca Real

          Y el viento que se caga en la noticia

Segando los sonidos

          De pura insensatez has preferido una vida brillante

(¿Brillante?)

          Peloteando entre psicoanalistas vagos guerrilleros

Artistas espléndidas mujeres pilares de bistró

          Lectores de novelas policiales

Cambiando dos por una en el Marché d´Aligre

          Dos Francis Rick contra un buen Ambler

Cuatro Carter Brown contra dos Stara

          Una docena de Chase (siempre es lo mismo) contra

Lady in the Lake

          O Red Harvest o La Reine des Pommes o Wincherly Woman

La escena de las fresas la escena del pico de hielo

          El torpe asesinato del marido

Y las manchas de sangre dulzona sobre el piso encerado

          Un laberinto de enaguas y de manos

Cáchame cáchame

          No tendremos mañana

Porque mañana no existe para nadie

          Tú eres Tú porque yo lo he querido

Y El Mundo (El Arcano XXI) te pertenece

          No es sino un modo de pasar por El Diablo (VIII)

Errando entre las sillas al alba de la fiesta

          Inmerso en una hecatombe de palabras

Un espejo te entrega lo idéntico y lo otro

          Una puerta una noche

Si soy el que deseas y deseas a otro

          Soy Otro

Y cuando te deseo no deseo ser otro

          Librado a la madera de los sueños

No tendremos mañana

          Como quien asume una pasión inconsecuente

Con la seguridad de ver borrarse los fantasmas

          A la llegada del alba

Tú y Yo

          Aturdidos huyendo por las alcantarillas

A La Paz (Baja California) o a Formentera

          Cris el Sevillano en dos días dio la vuelta a la Isla

Jean-Marie se colgó en el fondo de un pozo

          Frank cogió a martillazos a dos guardias civiles

Mi Reina Armada destruyendo los rangos de peones

          Un triángulo de luz polvorienta en cada mano

Del 1 al 0 al 1

          Y ahora Mi Reina es presa de la angustia

En un túnel como una tripa viva

          Que se abre sobre una playa donde un hombre desnudo medita

El Amor y La Paz

          California Dreani´

Un sueño en jeans T-shirts

          Playas tornasoladas de soles anaranjados (Wesselmann)

La sombra de viejos automóviles traqueteando

          Hacia un presente perpetuo

Une Ile entre le Ciel et l´Eau

          O un lago azul e inmenso

El ágape que cura las heridas

          Y el perezoso sol calentando mi cuerpo que no tiene

Orgullo ni deseo

          Un paquete de vidas reventadas por presencia de Lo Eterno

El Big-Bang repercute sus últimos ecos

          Y la gente deriva hacia todos los suburbios del planeta

Vagando meditando gozando predicando

          Rompiendo el delicado equilibrio entre Idea y Deseo

Un último sobresalto de Occidente

          Antes del encadenamiento de las guerras

Las heladas estrellas se agrupan del lado de La Osa

          Ella ha desaparecido

(Quién es Ella dónde está Ella)

          No confundas tu soledad y la suya

Cuando tires las tres monedas por seis veces

          SUNG

Esta línea muestra al sujeto vacilante frente a la disputa

          Vuélvela estudio de los dictados celestes

Abate sus deseos agresivos

          Reposa en la firmeza y corrección

Habrá buena fortuna

          Abate tus deseos abátelos te digo

Así podrás acceder a la contemplación

          Y el mundo rodará sin ti

Por una vez

          Y verás gotear las estaciones

En un cielo Ile-de-France

          Tendido en un camastro fascinado

Por una constelación de manchas de humedad

          Las nubes dibujan carneros castillos

Una majada de fantasmas desciende el Huascarán

          Trisca en torno de un ojo de agua

Pisoteando el diván del analista

          Repita eso

(Eso?)

          La memoria se posa sobre un campo de trigo

Y los caballos trotan en torno de la era

          Encerrados en un domo dorado

Tu padre bebe chicha de jora

          Y tú aloja fresca

Y más tarde la luna rondará la Casa-Hacienda

          Polvo de leche luz

Tus sábanas se prolongan en nevados

          Repita eso

El poema graffiti sobre un largo monólogo

          El tema del baúl el tema del poeta atormentado

Por la Sombra del Padre

          Un calembour dudoso colgado de la manga

(Nunca tocará fondo porque es forma)

          La hora de las visiones ha pasado

Quién sabe lo que sabe quien no sabe

          Hay una teoría de círculos concéntricos

Puesta para evitar un encuentro frontal

          Que ya tuvo lugar

Que apareció como un azahar en el verano

          Calmando mis sentidos crispados en la espera

En el sous-bois las armas

          Esparciendo un sonido metálico en el aire transparente

Lustros

          Y a la mañana siguiente un trapecio de niebla

Sube al Medio del Cielo

          El halcón malherido voltijea sobre el techo del mundo

Suspendido del verbo

          Que se balancea como un fruto

Demorando en caer

          Y te consumes fuera de la palabra

Que tal vez se alimenta a sí misma

          En inflorescencia perpetua

Y así entorpeces la demostración

          Empantanado en una noche sin fin

O detenido en un mediodía perfecto

          Un bocado de viento en las colinas

Una ventana abierta en la plaza del pueblo

          Que designa un imposible deseo

Y el tiempo el viento amargo

          Huye entre tu camisa

Como un recuerdo agudo y olvidado

          Así un día en el embarcadero de Santiago Atitlán

O cierta ven en Uxmal

          Indescifrable tu memoria en ruinas

Fuera de tema borracho como un Lord

          Contiguo a una galaxia burlona y superior

Más ebria que la noche bamboleante

          Ceñida a tu cintura hincándote las uñas

Mientras circulan retazos de ciudades

          Ramalazos de luces en el puerto

El esplendor vacante de tu cuerpo

          Animal expulsado de la música

Más acá del Edén donde no hay luz ni noche

          Sino incredulidad de cada gesto

Como quien sobrevive sin saberlo

          Y hay un valle que cierra el horizonte

Un río que la brisa acerca

          Y una mujer desnuda en la terraza

Tomando sol

          Nada es real salvo Lo Real

Desdeñoso irascible parpadeante y sumiso

          Eternamente anclado

Plantado frente al río que murmura

          Que tu vida se despliega y se agota

En la incesante perfección de su diferencia

          A causa de Entropía

Obedecida y pronto contradicha

          Por una dimensión confusa y vegetal

Y el azar te convoca para jugar un rol figurante

          En el chalet de abajo

Y en un delirio de provisiones y de ropa limpia

          Olorosa a lavanda

Viajas en tus palabras

Para estar siempre al día con lo último en noticias, suscríbete a nuestro Canal de WhatsApp.

Contenido externo patrocinado