Es inaudito ver a politiqueros de la derecha perdiendo la ética y la moral, si la tienen. Llenos de ambición, odio y rencor quieren llegar al poder a la brava, sin ganar las elecciones democráticamente en las urnas, no tienen vergüenza. Viven trasnochados solo pensando en fraudes, ya que ellos son expertos en hacerlo, carecen de lo más elemental, que son principios y valores. Los domina la ambición al poder. Ellos quieren gobernar el país para sacarse el dinero a paraísos fiscales y no pagar impuestos. Eso se llama traición a la patria. Si por desgracia, hubieran ganado las elecciones del 2 de abril de 2017, la situación económica del país ya estuviera por los suelos, igual como está sucediendo en otros países, porque el nuestro está en activa recuperación, gracias al actual gobierno constitucional del Ec. Rafael Correa Delgado. Estos politiqueros tienen la audacia de ofrecerles a delincuentes traerlos del exilio, ya que se fueron saqueando a nuestro país.

Bien dijo Job en su filosofía cristiana: “Ay de los tibios, no son ni fríos ni calientes”, o sea que son falsos e hipócritas. No debemos permitir en las posteriores elecciones que estos falsos salvadores de la patria gobiernen nuestro país. Son muy violentos, amenazan quemar a nuestra capital si no ganan las elecciones, llaman al pueblo a sublevarse poniendo en peligro la democracia, violando derechos democráticos y constitucionales, todos sabemos que la política es la ciencia de servir al que más necesita, pero algunos políticos no la aplican, ellos la utilizan para servirse. Muchos seguidores de estos politiqueros ambiciosos dicen que quieren un cambio, dicen que ya no quieren tantas obras del actual gobierno de la Revolución Ciudadana, quieren volver al pasado, o sea al tierrero en el que vivían anteriormente, que no haya escuelas, colegios del milenio, carreteras, hidroeléctricas, hospitales, etc. Son tan débiles de mente que se dejan engañar por estos falsos salvadores de la patria. Estos atrasapueblos se dejan seducir de las encuestadoras y de algunos medios de comunicación, sin medir las consecuencias que esto nos puede traer a todos los ecuatorianos, los declaran ganadores de las elecciones desconociendo a la máxima autoridad del  Consejo Nacional Electoral. Hay que tener humildad para ganar con dignidad, y también para perder. La humildad es característica de grandes personas.

Ing. José Yaguana Cuenca