El 4 de septiembre, mediante un comunicado conjunto, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Gobierno de Colombia anunciaron la firma del cese al fuego bilateral, el primero desde la fundación del grupo insurgente en 1964. El acuerdo es resultado de las negociaciones que se desarrollan oficialmente desde febrero de 2017 en Quito (Ecuador), con el acompañamiento de los gobiernos de Cuba, Venezuela, Chile, Brasil y Noruega, además del país anfitrión.

“Con el propósito de concretar acciones y dinámicas humanitarias, el Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional han acordado desarrollar un cese al fuego bilateral y temporal que reduzca la intensidad del conflicto armado. Su objetivo primordial es mejorar la situación humanitaria de la población”, señala el comunicado que suscriben Juan Camilo Restrepo, jefe de la delegación del Gobierno; y Pablo Beltrán, integrante de la Comandancia y jefe de la delegación del ELN. “Este cese iniciará a partir del 1 de octubre de 2017 y finalizará el 9 de enero de 2018”.

El texto informa que -para garantizar la eficacia del acuerdo- se establecerá un ‘mecanismo’ integrado por ambas partes en conflicto, además de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Iglesia católica. Este ámbito de seguimiento tendrá “el doble propósito de prevenir e informar cualquier incidente”. Además, anunciaron que extenderán el trabajo de este ciclo de conversaciones -el tercero- para ajustar aspectos logísticos del cese al fuego, aunque no precisaron hasta cuándo. Sí informaron que el cuarto ciclo de conversaciones iniciará el 23 de octubre.

Las partes se reúnen en ciclos de conversaciones que duran entre 45 días y dos meses, aproximadamente. El primer ciclo se desarrolló desde el 7 de febrero hasta el 6 de abril. El segundo, entre el 17 de mayo y el 30 de junio. El tercer ciclo, aún en curso, comenzó el 24 de julio y se preveía que finalizara el 1 de septiembre, apenas unos días antes de la visita del papa Francisco al país. Luego, este plazo se extendió, ante la posibilidad de recibir al Pontífice con la medida de cese al fuego.

“¡Sí se pudo! Agradecemos a todas y todos quienes apoyaron decididamente los esfuerzos para alcanzar este cese al fuego bilateral”, escribió la delegación del ELN a los diálogos de paz, a través de su cuenta en Twitter @ELN_Paz. Desde el Gobierno también celebraron, y no es para menos. El presidente Santos corona de esta forma un año en el que alcanzó el acuerdo de paz con las FARC -ahora consolidado con el lanzamiento del nuevo partido político-, avanza con el primer cese bilateral en la historia del ELN y, por si fuera poco, los próximos días lo tendrán en la vitrina mundial a partir del respaldo que le dará el Papa.

Desde las FARC también felicitaron al ELN por el acuerdo. “Un aplauso general a ELN y Gobierno por acuerdo #ceseBilateral de fuego logrado en Quito. Que nadie dude de la voluntad de paz de @ELN_Paz”, escribió Iván Márquez. Luego del anuncio conjunto, el Gobierno emitió un comunicado en el que ofreció más detalles sobre las características del acuerdo alcanzado. Entre otros ítems, la información difundida con la firma de Juan Camilo Restrepo explicita que “no se ha pactado solamente un silenciamiento de fusiles; se ha pactado también la suspensión de hostilidades durante la vigencia del cese al fuego”.

Por último, el Gobierno se comprometió a poner en marcha -en el cuarto ciclo de conversaciones- las primeras audiencias con la sociedad civil, que conforman “el primer paso para el desarrollo del punto número uno de la agenda sobre participación”, convenido en las conversaciones preliminares de 2016. (O)