Sueño. Eso al menos me pareció en la edición del pasado domingo 13 de noviembre donde de manera no muy acertada el generador de la pantalla decía “en vivo“ cuando Ecuador Tiene Talento ha sido pregrabado en la tarde, 5 horas antes para ser precisos.

Cuidado con ese detalle porque luego a la hora de los votos contados por mensaje a celular causan un dolor de cabeza y un mar de dudas. Lo ideal es que el programa se transmita en vivo.

Jonathan Estrada, de animador tras bastidores, se maneja mejor que cuando está en el medio del escenario. No sé si es nervios o inseguridad. No sé si son ambas cosas. No fluye. Dice una que otra barbaridad. Y sí me extraña, pues de los que conducen realities es el mejor, el menos malo. También es el más popular y de mejor estampa.

No debe dormirse en los laureles. Necesita leer más, viajar, nutrirse de conocimientos y experiencias.

La mayoría de los participantes es mala. El casting 2016 no ha sido el mejor. Sí lo es el panel de jueces, Francisco Pinoargotti es frontal sin dárselas de brujo, que eso está gastado y nadie se lo creía. Carolina Jaume y Fernando Villarroel son precisos, gozan de su papel de jueces. En el caso de Paola Farías, si va a ilustrar su comentario con alguna película, sería genial que recuerde el nombre de la cinta. Y en teatro se usa un audífono, que es el retorno del audio; no se usa apuntador. Si esa pelea fue libreteada, existió un error de parte de quien la escribió; y si no lo fue, alguien no quedó bien parado.

Designer Book

María Susana Rivadeneira y Carlos Stowes son las cabezas visibles del evento de proyección de la moda ecuatoriana Designer Book 2016, que
con mucho éxito se realizó el pasado 9 de noviembre en Plaza Lagos, un mall al aire libre, pero rodeado de estupenda seguridad, con tiendas art déco y restaurantes con mesitas en los portales, ubicado en Samborondón. La pasarela a ras del piso permitió ver las creaciones de los más destacados de una moda “sostenible y respetuosa con el medio ambiente”. Gustavo Moscoso es un diseñador cuencano que con prestigio y soltura exhibe cada año verdaderas maravillas. Su propuesta mezcla juventud y desenfado, sin caer en lo ordinario. Milu Espinoza, de Quito, renueva fuerzas en el Designer Book.

Vanessa Graf muestra creaciones para la mujer actual, sin nada estrambótico y a la vez con mucha clase. Sí se puede crear y establecer moda en Ecuador. También se puede hacer empresa relacionada con la moda en Ecuador y, de paso, crear conciencia, no solo en el medio ambiente, sino además ayudar los jóvenes a creer en lo nuestro. El Designer Book muestra al mundo no solo lo mejor del país en cuanto a cultura de la moda, también permite a muchos jóvenes trabajar en algo poco común como modelos, fotógrafos, músicos, decoradores. Esa también es una forma de crecer. Lo ideal sería que las nuevas ediciones sean de varios días, al estilo Miami Fashion Week, e incorporar talleres y seminarios. El éxito de este evento es tal, que en Chile se prepara uno similar, con las mismas cabezas que aquí han cosechado éxitos contundentes: Rivadeneira y Stowes. (O)