Bajo un intenso calor, los devotos de la Virgen del Cisne caminaron ayer, desde su basílica hasta San Pedro de la Bendita, en su primer tramo antes de llegar a Loja el próximo domingo.

Tras la liturgia, celebrada por monseñor Alfredo Espinoza, los romeriantes salieron con la ‘Churonita’, llamada también de esta manera, para recorrer los primeros 20,5 kilómetros.

En la llamada ‘Fuentes de Agua’, los peregrinos hicieron su primera parada con la imagen. Los cánticos y las oraciones fueron parte importante durante este trayecto.

Posteriormente en la hacienda La Bendita también tuvieron un breve descanso, debido a que el sol agotó a los devotos.

Son 253 miembros de la Policía Nacional que acompañan a la Virgen a lo largo del trayecto. Ellos se encargan de cuidar la integridad de los caminantes, como también de la imagen. Personas de todas las provincias de Ecuador, en especial del sur, llegaron expresamente para esta fiesta religiosa, calificada la más grande del país.

La presencia de la Virgen reactivó también el comercio. Vendedores se ubicaron a lo largo de la vía con la oferta de agua y comidas rápidas, aunque creen que este año hay menos feligreses, sin embargo indican que es un momento para obtener recursos y prepararse para el inicio de clases que está por comenzar en septiembre en la región Sierra.

La Virgen llegó hasta San Pedro de la Bendita pasadas las 14:00, donde fue recibida por los habitantes del sector, pero también por  sus fieles.

Para hoy la ‘Churonita’ arribará al cantón Catamayo en horas de la tarde y allí permanecerá hasta el domingo en la madrugada que saldrá hasta Loja, en el último trayecto que está previsto dentro de esta peregrinación que se realiza cada año. La imagen volverá a su basílica en el Cisne, el 17 de noviembre.

Cámaras vigilan la procesión de la Virgen del Cisne

El ECU-911 desde ayer hace el seguimiento a los romeriantes de la Virgen del Cisne. Esta institución puso en funcionamiento 15 cámaras de videovigilancia. En la institución laborarán hasta el domingo 144 personas durante las 24 horas para hacer una vigilancia a todo el desarrollo de la procesión.

Las cámaras están instaladas en la parroquia El Cisne, San Pedro de la Bendita, Catamayo y en la ciudad de Loja, donde llegará la imagen el próximo domingo en la tarde. (I)